La capacidad de Álvarez Máynez se encuentra a prueba desde su llegada a la coordinación de la dirigencia nacional. Su único mérito político fue ser el primer candidato presidencial de ese partido en 2024, a través de una maniobra histórica: “el dedazo del caudillo”, y el apadrinamiento y protección de la presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Mónica Soto Fregoso, para evitar la impugnación de su candidatura. Esa es su historia y su valor.
A 40 días de la jornada electoral, Veracruz es la entidad que tiene preocupados a los integrantes del Consejo Nacional, ya que el rumbo que tomó Movimiento Ciudadano va hacia la conversión de un partido poco activo y aislado. Las recientes renuncias de los emecistas se encuentran en El Higo, Gutiérrez Zamora, Landero y Coss, Las Choapas, Manlio Fabio Altamirano, Minatitlán, Platón Sánchez y Tuxpan, todas esas salidas del partido naranja forman parte del desinterés que muestra la dirigencia de Álvarez Máynez. No retiene simpatías por la falta de fuerza al tiempo que el partido se hunde en viejas prácticas enmascaradas con jingles pegajosos.
Al excandidato presidencial le dejaron un partido con dos gubernaturas, Nuevo León y Jalisco; además de las ciudades capitales de Guadalajara y Campeche. Mientras, la bancada en el Senado es de cinco escaños, y en la Cámara de Diputados lograron conseguir 27 curules. Los resultados de los dos estados en disputa, Veracruz y Durango, deben sumar al partido, de lo contrario Álvarez Máynez se convertirá en un dirigente opositor fallido.
Otro síntoma de que el partido se encuentra alejado de la ciudadanía y militancia es que en las pasadas elecciones estatales, su candidato a la gubernatura, Hipólito Deschamps, obtuvo apenas el 6.7 % de la votación. Y en este momento, ya ni siquiera milita en emecé. El partido se enfila a una debacle electoral por la endeble conducción de Máynez.
Jorge Álvarez Máynez es hechura política de Dante Delgado y no puede ir en contra de lo que hizo su mentor político. El fundador del partido sepultó políticamente a Movimiento Ciudadano desde 2023 al negarse a lanzar candidatos en las elecciones estatales de Coahuila y Estado de México, y esa es una realidad con la que debe lidiar el nuevo dirigente. El partido dejó de aceitarse en los estados.
Las elecciones estatales las sepultó Dante Delgado, la prueba que tiene Álvarez Máynez es compleja. Se enfrenta a la consolidación de Morena en Veracruz y carga el pasado de que el partido está desarraigado de los militantes en los estados en competencia. Si se suma la fragilidad de su dirigencia, la ecuación es simple. Se advierte una fuerte derrota.
