Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, aseguró que desde el sexenio de Vicente Fox, 2000-2006, se robaban mucho combustible. Indicó que el robo continuó durante los sexenios de Felipe Calderón y de Enrique Peña Nieto.
“Es muy importante que se tenga presente que se robaban mucho combustible, esto desde el sexenio de Vicente Fox, luego con Calderón y luego con el presidente Peña Nieto”.
“Ahora, es muy interesante esto. Les hablaba yo de que este problema venía desde el gobierno de Fox, bueno, este asunto se toleraba porque había complicidad, es como todo, como el funcionamiento de la llamada delincuencia organizada, siempre hay protección, hay impunidad”.
“¿Saben que se robaban el combustible, pero tenían los equipos más sofisticados para detectar la ordeña de los ductos, el que había sensores? En la Torre de Pemex, un piso, el tercero, estaba lleno de equipos y en los ductos había sensores, y cuando bajaba la presión porque estaban extrayendo combustible, en ese centro de monitoreo sonaba una alarma y sabían dónde se estaban robando el combustible, nada más que podía sonar la alarma todo el día, o dos o tres días, y nadie acudía”.
Aseguró que cuando él era jefe de gobierno del Distrito Federal, hoy Ciudad de México, participó en una reunión con funcionarios federales en la que se reconoció que se habían perdido 12 mil millones de pesos por robo de combustible.
“Y cuando les hablo del sexenio del presidente Fox es porque me consta. Era yo jefe de Gobierno y fui a una reunión de la Conago, porque supuestamente iban a entregar a los gobiernos estatales excedentes por precios elevados de petróleo, excedentes de lo que había estimado la cámara en el presupuesto y se había vendido petróleo a más precio, y eso permitía repartir un excedente como de 15 mil millones a todos los estados”.
“Llegamos a la reunión, era secretario Gil Díaz y subsecretario Carstens, y nos informan en esa reunión de que, en efecto, se tenía un excedente de 12 mil millones para repartir, o 15 mil, pero que había que descontar 12 mil millones por el robo de combustible, o sea, lo tenían hasta contabilizado. El caso es que nos quedamos ahí todos, nada más lamentando que no nos iban a dar nada, 12 mil millones, les estoy hablando como de 2003, 2004”.
Combate a huachicoleros
Andrés Manuel López Obrador aseguró que cuando él asumió la presidencia los huachicoleros robaban diariamente 56 mil barriles de combustible y que ahora sólo roban 4 mil 300.
“Esto continuó, siguió, al grado de que cuando llegamos nosotros se estaban robando en promedio 56 mil barriles diarios. Miren, ya para el 19, el año pasado, y este es el promedio que llevamos ahora, cuatro mil 300 barriles diarios de 56 mil de promedio barriles diarios en el 18; pero en noviembre, cuando llegamos al gobierno, eran 80 mil barriles diarios los que se robaban”.
“Si tomamos en cuenta… ¿No tienes la de noviembre?, donde hay dos barras. Eso es muy importante porque este tema se desconocía porque los medios de información estaban totalmente apergollados, ahora es distinto”.
“¿Y saben por qué reitero, reitero, parezco disco rayado? Porque hay quienes todavía dicen que no hay cambios, dicen: ‘¿Dónde están los cambios?’ Estaba yo viendo un texto, una frase de un periodista de derecha, conservador, Sarmiento, no sé de quién es la frase, él la usa, dando a entender que todo sigue igual, este señor Sarmiento”.
“Aquí está, miren. Este es noviembre del 18, miren lo que se robaban, 81 mil barriles diarios, y este ha sido el comportamiento por mes, este es agosto”.
Aún hay tomas clandestinas
Andrés Manuel López Obrador afirmó que cuando el gobierno tomó la decisión de terminar con el robo de combustible hubo presiones y sabotaje.
“Como tomamos la decisión -entrando- de que se acababa el huachicol, hubo presiones fuertes, quisieron jugar a las vencidas y hubo sabotaje, nos rompían los ductos. La gente se portó muy bien porque padecimos de combustibles, había que hacer colas para cargar”.
“Le informamos a la gente, nos ayudó mucho el apoyo del pueblo, como decía el presidente Juárez, con el pueblo todo, sin el pueblo nada, resistimos y se adquirieron en tres meses más de 600 pipas para no depender sólo de los ductos, porque había bloqueo y estábamos enfrentando a estas bandas, toda una red de complicidades y componendas”.
“Entonces, se le pidió a la Secretaría de la Defensa que nos ayudara para operar las pipas y no tener problema, porque llegaban los barcos a Tuxpan, de la gasolina que se compra en el extranjero, y no se podía meter el combustible al ducto Tuxpan-Azcapotzalco porque lo tenían tomado; entonces, llegaron las pipas y empezamos a abastecer con pipas, y se sigue abasteciendo con pipas”.
“Desde luego ya se normalizó el transporte de combustible por ductos que es, entre otras cosas, más barato”.
Reconoció que actualmente, el robo de combustible continúa, pero precisó que hay muy pocas tomas clandestinas.
“Todos, todos. Muy pocos, hay todavía tomas clandestinas, nos interrumpen un ducto, se atienden las tomas, tenemos todavía vigilancia, pero ya el resultado es otro”.