• 08 de Mayo del 2024

El plan C

 

 

Israel Mendoza Pérez

@imendozape

El camino de Morena en la Ciudad de México, rumbo a la definición de su "coordinador de los comités de defensa de la Cuarta Transformación" será lento. Aunque la dirigencia tiene el “plan c” —ordenado desde Palacio— en el que se comenzó a mover la alcaldesa Clara Brugada. Sin embargo, en cuanto se defina coordinador nacional de defensa de la cuatroté, su voz se tomará en cuenta para tener una dupla capaz de asegurarle votos en la capital y queda minimizada la dirigencia de Sebastián Ramírez, dirigente local del partido en el poder.

La posibilidad de que Clara Brugada sea primero —la coordinadora de los comités de la defensa de la cuatroté en la capital— depende del factor de que las “corcholatas” terminen el proceso de “coordinador de los comités de defensa de la Cuarta Transformación a nivel nacional" en septiembre y la ciudad de México se convierta en uno de los premios de consolación para los aspirantes derrotados de Morena.

La negociación es amplia ya que los candidatos a nivel nacional pueden ver a la ciudad como uno de los espacios de gobierno apetitoso para reforzar su carrera política. Aunque ello implica el desplazamiento de la alcaldesa Clara Brugada. Sin embargo, al mismo tiempo le dan una prueba de confianza ya que si sale el plan como se trazó ella se puede quedar con la candidatura. Por eso le dicen que ella forma parte del “plan c”. Brugada ha respondido a los designios del Presidente desde años atrás pese y haberse ganado el mote de “Juanita”, cuando a través de una maniobra política orquestada por López Obrador negoció la declinación del triunfo de Rafael Acosta “Juanito” de la alcaldía de Iztapalapa en 2009 a favor de la entonces perredista. Ahora vuelve a ser la pieza de cambio.

En este entuerto, la operación política de Sebastián Ramírez está debilitada. Tiene que obedecer los ajustes desde Palacio Nacional. Y ello muetras que el partido en el poder, en la capital, se encuentra a la deriva y sin un liderazgo sólido. Sebastián Ramírez, dirigente de Morena en la Ciudad de México sabe que el partido carece de un personaje con la fuerza y peso suficiente para contener el avance la Alianza por la Ciudad que tienen perfilada PRI, PAN y PRD rumbo a 2024. Todo depende de lo que se decida a nivel nacional. Esa inacción afecta al partido en el poder en la ciudad y las decisiones tiene una dinámica distinta y excesivamente lenta.

La tardanza en Morena en la Ciudad de México comienza a jugarle de manera adversa. Los tiempos de Morena en la Ciudad de México, no son los mismos que a nivel nacional. El partido que encabeza Sebastián Ramírez, carece de actividad por parte de “corcholatas” a nivel local y eso comienza a pesar en el ánimo de los aspirantes, ya que mientras la oposición se reagrupa para la batalla electoral, el partido en el poder en la capital apenas comienza a trazar la ruta, dictada desde Palacio, para recuperar lo perdido en 2021.