La Casa Blanca ha rechazado categóricamente las afirmaciones de que haya alguna investigación en curso sobre el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, relacionada con posibles vínculos con el narcotráfico.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, declaró en una conferencia de prensa que el Departamento de Justicia no ha llevado a cabo ninguna investigación al respecto, desmintiendo así las especulaciones planteadas por un artículo del diario The New York Times.
“Continuamos trabajando con la administración del señor López Obrador para hacer lo que podamos para abordar esta migración sin precedentes en el hemisferio y la situación en la frontera, que sigue siendo un gran enfoque para el presidente Biden en esta administración”, aseveró el portavoz.
En respuesta a las preguntas de los periodistas, Kirby reiteró que no hay evidencia de ninguna investigación en curso contra el presidente mexicano, y destacó la importancia de mantener una estrecha colaboración con la administración de López Obrador.
“Tendría que dirigirle al Departamento de Justicia para cualquier cosa específica y, como ya lo han dicho, consta en el expediente que no hay ninguna investigación sobre el presidente López Obrador”, respondió Kirby al recordar la aclaración que hicieron tras el reportaje publicado por Tim Golden en el mismo sentido, pero en 2006.
Estas declaraciones surgen en medio de la controversia generada por el mencionado artículo del New York Times, en el que se sugiere la existencia de presuntos pagos del narcotráfico a la campaña electoral de López Obrador en 2018.
El presidente mexicano ha calificado estas acusaciones como infundadas y ha denunciado el periodismo sensacionalista del periódico estadounidense.
En un ambiente de tensión diplomática potencial, se ha destacado la importancia de mantener una relación constructiva entre Estados Unidos y México, especialmente después de episodios anteriores de fricción, como el arresto en 2020 del exjefe del Ejército mexicano, Salvador Cienfuegos, por cargos relacionados con el narcotráfico.
A pesar de las acusaciones y la polémica generada, la administración estadounidense ha reafirmado su compromiso de trabajar en conjunto con el gobierno de López Obrador para abordar los desafíos compartidos en la región, mientras que el presidente mexicano ha instado a una aclaración de las autoridades estadounidenses respecto a la situación planteada.
