El fantasma de la desinformación, fabricado por el presidente Donald Trump, recorre Estados Unidos tras una elección que se quedó empantanada con una tendencia favorable al candidato demócrata Joe Biden, que está, desde el martes por la tarde, a seis puntos de conseguir los votos necesarios para ser el nuevo titular del Ejecutivo.
Desde la madrugada del miércoles, Trump se ha dedicado a enviar tuits incendiarios y equívocos reclamando que se ha dado un fraude electoral y se debe suspender el conteo de los votos y amenazando con presentar demandas en todos los estados en los que Biden ha logrado ventaja para revertir los supuestos fraudes.
Anoche, varias cadenas de televisión interrumpieron la transmisión de un discurso de Trump por considerar que su contenido propiciaba la desinformación.
Según el mandatario, Casa Blanca que ganaría fácilmente, si se contaran los "votos legales", pero que si se incluían los "votos ilegales" , los demócratas podrían intentar "robarnos" las elecciones.
En ese momento y muy rápidamente, el canal MSNBC cesó su emisión en vivo. NBC News y ABC News también interrumpieron la transmisión que finalmente acabó no siendo una rueda una rueda de prensa, ya que el presidente abandonó el escritorio sin contestar preguntas de los periodistas.
El Comité de Abogados por los Derechos Civiles y la organización Causa Común escribieron una carta en la cual solicitan a la red social Twitter que agrave sus acciones para evitar que Trump siga realizando declaraciones engañosas.
En la carta dirigida a esta red social, las organizaciones hacen patente su temor frente a los señalamientos que Donald Trump ha emitido y que tiene un gran alcance.
Mientras tanto, por tercer día consecutivo, volvieron a la calle dos grupos de manifestantes. Unos exigen que todos los votos de la elección del martes pasado sean contados, mientras que los otros apoyan las acusaciones de fraude electoral del presidente Trump. La policía patrulla varias de las calles, algunos de ellos armados con rifles cortos.
Moviliaciones
Un centenar de partidarios del presidente Donald Trump, en su mayoría hispanos, se manifestó en Miami en apoyo a las denuncias del republicano de un supuesto “fraude” en el recuento de papeletas en otros estados tras las elecciones del martes pasado.
Los manifestantes denunciaron un presunto “robo electoral” mientras prosiguen los recuentos de las papeletas en varios estados para definir el ganador entre Trump y Biden.
Contando a Arizona, que varios medios proyectaron que será para el exvicepresidente, Biden suma ya 264 delegados en el Colegio Electoral de los 270 que necesita para ganar, frente a los 214 que acumula Trump, quien ha presentado varias demandas judiciales para detener el proceso.
En Filadelfia, varios manifestantes arribaron al Centro de Convenciones que sirve de sede para el conteo de votos. De acuerdo con la agencia de noticias AJN, en Phoenix, al menos dos docenas de partidarios de Trump se reunieron afuera del ayuntamiento para cantar “Protejan nuestros votos”.
En Nueva York, los manifestantes recorrieron primero las calles aledañas al parque Washington Square, al grito de “No Trump, No KKK (Ku Klux Klan), No Facist USA” y “No hay justicia, no hay paz. Maldita policía racista”.
Sin un ganador aún declarado en las elecciones a la Presidencia de Estados Unidos, la atención se centra en el resultado de algunos estados indecisos restantes a favor de Donald Trump o Joe Biden.
Varios manifestantes fueron arrestados también durante una manifestación en Minneapolis (Minnesota), donde según la cadena CBS, marcharon con varias contra Trump.
Estrategia jurídica
En Pensilvania, el equipo republicano pidió suspender el escrutinio, sin embargo, un juez federal desechó la petición.
Trump señaló ayer que los observadores electorales del Partido Republicano no pudieron realizar su labor, lo que propició que se presentara la demanda este jueves.
Mientras, jueces de Georgia y Michigan desestimaron rápidamente las demandas interpuestas por la campaña de Trump, socavando una estrategia legal para atacar la integridad del proceso electoral en estados donde el resultado podría significar la derrota del mandatario.
Un juez federal de Washington, D.C., ordenó al Servicio Postal de Estados Unidos que efectúe dos revisiones diarias en sus centros de procesamiento ubicados en estados que tienen plazos extendidos para recepción de votos a fin de que busque los votos enviados por correo y acelere su entrega.
La orden se mantendrá vigente hasta el final del periodo para la recepción de votos en esos estados.
En conferencia de prensa Joe Gloria, funcionario del estado de Nevada, informó que todavía sigue el conteo de votos y podrían tardar hasta el 12 de noviembre.
El funcionario apuntó que los datos informados en el portal web del estado estaban mal, aunque ya fueron corregidos.
Biden en calma
Mientras, el exvicepresidente Joe Biden pide paciencia y señala que todos los votos serán contados.
“Esta es la voluntad de los electores, nadie ni nada más elige al presidente de Estados Unidos de América, por lo que cada papeleta debe ser contada”, indicó Biden desde Wilmington (Delaware).
Se esperan todavía los resultados de Arizona, Nevada, Georgia, Carolina del Norte y Pensilvania. En todos la competencia es cerrada y el conteo podría concluir este viernes.
Los conteos continúan en cinco estados, donde la diferencia es mínima, pero el más cercano a la victoria es Biden, pero necesita asegurar Arizona, Nevada y apuntarse Pensilvania, los cuales ofrecen 11, 6 y 20 votos electorales, respectivamente.
En Carolina del Norte se pelean 15 votos y en Georgia 16. Si el presidente Trump gana ahí no suma los 270 votos electorales. También falta Alaska, un estado republicano que ofrece tres votos electorales.
En tanto, Biden puede asegurar su triunfo con Pensilvania o Georgia, pero si logra ambos su paso a la Casa Blanca sería más difícil de cuestionar.
La secretaria de Estado en Arizona, Katie Hobbs, adelantó que habría mayor claridad de resultados este viernes.