Con sólo cuestionar el origen del dirigente estatal del PRI, Néstor Camarillo, el gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, echó por tierra las declaraciones del también priista, quien había señalado que los mandos militares no resolverían los problemas de seguridad. Finalmente, el legislador terminó cambiando su versión.
En la conferencia mañanera de este lunes, el gobernador respondió a los cuestionamientos sobre las declaraciones de Camarillo, quien había asegurado que la inseguridad no se resolvería con mandos militares. Armenta lanzó una indirecta contundente al mencionar el municipio natal del priista:
“¿De dónde es Néstor? ¡Ah! Quecholac. Fíjense. Ya con eso les digo todo, para qué contesto. Ya, nada más Quecholac. Entonces, ustedes saben qué es Quecholac, lamentablemente”, señaló, en alusión al municipio ubicado en el llamado Triángulo Rojo por el robo de hidrocarburo.
El mandatario además criticó la falta de coherencia de Camarillo al hablar de seguridad, sin necesidad de explicar a detalle:
“Hay que tener la cola chica para tener la boca grande. Pero yo respeto a todos, tienen derecho a expresarse, aunque no haya congruencia”, atajó el mandatario.
El mismo lunes, Camarillo matizó sus declaraciones y modificó su postura inicial, al expresar su respaldo a la propuesta del gobierno estatal.
“Bienvenido un mando de la Marina”, declaró en su rueda de prensa. Luego de haber rechazado previamente la recomendación del secretario de Seguridad Pública estatal, Vicealmirante Francisco Sánchez González, de que un marino asuma la titularidad de la SSC tras el asesinato de dos policías en Bosques de San Sebastián.
“Dije que los problemas en los municipios no eran los mismos, es distinto, y que yo, en una crítica constructiva, decía que, para mi gusto, para mi pensar, de Néstor, no del PRI, la inclusión de la Marina en la seguridad no era idónea o no era la mejor. Sin embargo, estamos esperando que esta estrategia genere buenos resultados”, explicó.
El cambio de postura del dirigente priista dejó en evidencia la presión política y social que enfrentó tras sus declaraciones. Además, el enfrentamiento con el gobernador Armenta evidenció la fragilidad del discurso priista sobre seguridad y el peso de su historial político en el debate público.
#Puebla | El gobernador de Puebla, @armentapuebla_, responde con contundencia al senador @NestorCamarillo tras sus críticas sobre los mandos marinos en Seguridad Pública: “Hay que tener la cola chica para tener la boca grande”. Además, le recordó su origen: “Es de Quecholac, con… pic.twitter.com/nssdsq6zYj
— exilio_mx (@MxExilio) March 3, 2025