• 16 de Mayo del 2024

Recomendaciones para enfrentar una agresión de tránsito

Usar un vehículo saca lo peor de nuestra personalidad, dicen especialistas.

La paulatina salida de la pandemia volvió a traer problemas como las agresiones por hechos de tránsito en las principales ciudades de la entidad poblana, según un análisis de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), capitulo Puebla.

Golpes, gritos y corretizas en plena calle, y que son registradas en videos por teléfonos móviles, se repiten cada vez con mayor frecuencia, aunque aumentan los fines de semana y en periodos vacacionales.

A decir de Anuar Musalem Valencia, subdirector de la AMTM Puebla, los accidentes crecen principalmente en ciudades destino los sábados y domingos, en función directa de quienes no conocen las vialidades del lugar.

Según la AMTM, esto se debe hacer ante una agresión producto de un hecho de tránsito:

-Accione las luces intermitentes; por normatividad significan alerta para los conductores contiguos, hipotéticamente se estaría avisando de un evento o maniobra que requiere la atención, apoyo u auxilio de los demás conductores.

-Llame de inmediato al 911; recuerde: la autoridad vial es la única responsable de calificar, sancionar o amonestar una conducta indebida.

-No provoque al agresor; si la otra persona actúa de modo altanero o prepotente, lo mejor es no responder con sarcasmos o ser lo más breve posible, use frases como “mi ajustador está en camino” o “ya le marqué a la policía vial”.

-No descienda del vehículo y cierre las ventanas; si el agresor se atreve a golpear nuestro automóvil, la infraestructura seguramente resistirá, y dejará de ser un hecho de tránsito calificando cómo delito, el agresor será responsable del daño.

-Intente documentar los hechos (haciendo énfasis en placas y elementos de identificación).

 Nunca intente darse a la fuga

 Probablemente la primera acción que llega a su mente es la de evadir al agresor, darse a fuga, realizar un maniobra evasiva o equivalente, pero lo anterior solo lo hace alguien con adiestramiento, un conductor convencional podría detonar un hecho de tránsito catastrófico o inclusive, provocar la muerte del agresor, la evasión solo es recomendable al ver su vida en riesgo.

 Reflexión

 ¿Por qué somos violentos al volante?, las causas que originan la violencia o agresión al volante se dividen en sociológicas y psicológicas.

 -La conducción es una extensión de nuestra verdadera personalidad, al sentirnos bajo el resguardo de la infraestructura de un vehículo sacamos lo peor de nosotros.

-Consideramos una invasión a nuestra “percepción de propiedad” cualquier contacto físico hacia nuestro vehículo.

Evite ser agresivo al volante, no permita que el espiral de la violencia crezca.