El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) deportó este lunes a México a Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cártel del Golfo, quien es buscado en el país por homicidio y posesión ilegal de armas de fuego.
La operación comenzó en la Penitenciaría de Terre Haute, Indiana, donde Cárdenas permanecía bajo custodia. Agentes del ICE lo trasladaron al Centro de Detención de Otay Mesa, California, y posteriormente lo escoltaron hasta el puerto de entrada de San Diego, donde fue entregado a las fuerzas del orden mexicanas sin incidentes.
Samuel Olson, director de la Oficina Especial de Operaciones de Ejecución y Expulsión del ICE en Chicago, destacó la coordinación entre las oficinas de San Diego, Harlingen, Ciudad de México y la División de Operaciones Internacionales. «La detención de Osiel Cárdenas, un célebre prófugo internacional, pone de relieve nuestro compromiso inquebrantable con la seguridad pública y la justicia», declaró.
Olson subrayó que la deportación es un ejemplo del trabajo conjunto entre agencias estadounidenses y mexicanas para garantizar que individuos peligrosos enfrenten procesos judiciales.
Cárdenas Guillén, capturado en México en 2003 y extraditado en 2007, cumplió una condena en Estados Unidos por tráfico de drogas y amenazas a agentes federales. Durante su liderazgo, el Cártel del Golfo consolidó operaciones de narcotráfico y creó Los Zetas, brazo armado que se caracterizó por su violencia.
La deportación de Cárdenas Guillén representa un paso más en la cooperación bilateral contra el crimen organizado y deja en manos de la justicia mexicana los pendientes legales que enfrenta.