El presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su preocupación y desaprobación ante la reciente decisión del gobierno estadounidense de construir más tramos del muro fronterizo en el condado de Starr, Texas. Esta medida, anunciada como parte de un cambio de política bajo la administración del presidente Joe Biden, ha suscitado críticas y rechazo tanto en México como en Estados Unidos.
Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, calificó esta iniciativa como un "retroceso" y enfatizó la necesidad de abordar las causas subyacentes de la migración en lugar de erigir barreras físicas. Afirmó que apoyar a los países de América Latina y el Caribe con programas de bienestar, actividades productivas y empleos es fundamental para abordar los desafíos migratorios de manera efectiva.
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— Al Momento 4T (@Almomento4T) October 5, 2023
AMLO hablará sobre migración, narcotráfico y el muro, con comitiva de EU
El presidente adelantó que hoy se reunirá con una comitiva estadounidense, encabezada por el secretario de Estado, Antony Blinken; detallo que, “todo el día van a trabajar… pic.twitter.com/7UhlAM3W9k
La construcción adicional del muro fronterizo en el condado de Starr, Texas, es parte de un cambio significativo en la política fronteriza de Estados Unidos. La administración de Biden, al principio de su mandato, había proclamado que no utilizarían más fondos de los contribuyentes estadounidenses para construir el muro.
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos anunció la necesidad de exenciones legales para garantizar la construcción rápida de barreras y carreteras en las inmediaciones de la frontera terrestre internacional en el condado de Starr, Texas. Estas medidas, según el gobierno estadounidense, son necesarias para evitar la entrada ilegal de migrantes a Estados Unidos en estas áreas específicas.
El aumento en los cruces irregulares de migrantes ha sido una preocupación creciente en la región. Las detenciones de migrantes intentando cruzar la frontera sur de manera irregular aumentaron en 36 por ciento durante agosto, a pesar de las medidas más estrictas implementadas por el gobierno demócrata para limitar el acceso al asilo en territorio estadounidense.
La decisión del gobierno de Biden de eximir el cumplimiento de más de veinte leyes, incluyendo regulaciones ambientales y de conservación cultural, para llevar a cabo estas labores de construcción ha generado controversia. Grupos defensores del medio ambiente han criticado esta medida, argumentando que es la primera vez que el gobierno demócrata utiliza su autoridad para evitar tales leyes.
