Si los ciudadanos y autoridades continúan con la implementación de las medidas para evitar más contagios de coronavirus en los siguientes 45 días, en las primeras semanas de enero de 2021 podría establecerse un esquema de regreso a clases presenciales, adelantó el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro.
"Este año no hay condiciones para regresar a las clases presenciales. Vamos a concentrarnos en trazar la ruta para el regreso, en enero de 2021, en diálogo permanente con el magisterio", anotó.
El mandatario agregó que este ciclo escolar terminará con el modelo de educación a distancia al no haber condiciones de salud para que los alumnos regresen a las aulas, pero si se mantiene la disciplina el siguiente año la situación podría cambiar para que los estudiantes retomen su formación de manera presencial.
Por medio de un video publicado en redes sociales, el mandatario detalló que optarán por nuevas medidas preventivas y sanciones para quienes las incumplan, razón por la que desglosó el diseño de la estrategia para combatir la Covid-19, que según dijo, será por territorios.
En las siguientes semanas las autoridades de Salud y Educación conformarán mesas de trabajo para avanzar hacia un modelo seguro, y además se tomarán en cuenta las opiniones de padres de familia, maestros y expertos en educación para llegar un consenso y evitar poner en riesgo a los estudiantes.
Alfaro Ramírez explicó que habrá una evaluación de indicadores, además de reajustar hábitos de convivencia individuales, familiares, laborales y sociales, al tiempo que se controlarán los aforos en lugares cerrados y abiertos.
Resaltó que también se vigilará el comportamiento de la ocupación hospitalaria y los pacientes graves, mediante indicadores bases e indicadores complementarios evaluados por la mesa de Salud.
“Indicadores base, ahora nos vamos a concentrar en la ocupación hospitalaria. Vamos a medir la ocupación semanal y el porcentaje de enfermos graves en cuidados intensivos, esto nos permitirá ir viendo nuestra capacidad de respuesta”, refirió.
Jalisco fue la primera entidad en suspender las clases presenciales en todos lo niveles a inicios de marzo por el avance de la epidemia. La entidad se encuentra en semáforo naranja.
