El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, y su ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amirabdollahian, murieron en un trágico accidente de helicóptero el pasado domingo. La aeronave se estrelló en una zona montañosa de la provincia de Azerbaiyán Oriental, en condiciones climáticas adversas, según confirmó un alto funcionario iraní que pidió no ser identificado debido a la sensibilidad del incidente.
Los equipos de búsqueda localizaron los restos del helicóptero en el sitio del accidente, constatando que todos los pasajeros, incluido el presidente Raisi y el ministro Amirabdollahian, fallecieron.
La agencia de noticias Mehr de Irán también confirmó las muertes, describiendo a los fallecidos como "martirizados" en el trágico suceso. Además, la televisión estatal iraní mostró imágenes del lugar del accidente, indicando que el helicóptero había colisionado contra la cima de una montaña y se había incendiado completamente, aunque aún no se ha determinado oficialmente la causa del accidente.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Seyed Ali Khamenei, expresó sus condolencias por la pérdida de Raisi y su séquito en un comunicado, declarando cinco días de luto nacional y designando al primer vicepresidente como responsable del Poder Ejecutivo.
En su mensaje, el ayatolá Khamenei describió a Raisi como un "servidor competente y trabajador del imán Reza" y destacó su dedicación y sacrificio por el bienestar del pueblo iraní. "La nación iraní ha perdido a un individuo devoto, sincero y valioso", lamentó el líder supremo.
La noticia de la muerte de Raisi ha provocado conmoción tanto en Irán como en la comunidad internacional. El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, expresó sus condolencias y subrayó la importancia de este acontecimiento en el contexto global.
“Ofrecer al pueblo iraní nuestras condolencias por el fallecimiento en un accidente, hasta ahora es la información que se tiene del presidente de Irán y del canciller de esa República.
“Nuestro más profundo pésame por este fallecimiento de los dirigentes, del presidente, del canciller y de otros miembros del gobierno de Irán”, dijo.
Aprovechó también para enviar una felicitación al presidente de República Dominicana, que se religió ayer por voluntad de su pueblo, “Luis Abinader obtuvo el triunfo en las elecciones del día de ayer con un amplio margen”.
También, dijo que hace dos semanas “se nos pasó felicitar al nuevo presidente de la República hermana de Panamá. Todo esto lo vamos a hacer formalmente en su momento”.
El impacto de la muerte de Raisi es significativo no solo para Irán sino también para la región y el mundo, ya que plantea incertidumbres sobre la estabilidad política y la continuidad de las políticas gubernamentales en un momento crítico. La comunidad internacional observa con atención cómo se desarrollarán los acontecimientos en Irán tras esta tragedia.
