• 30 de Abril del 2024

Ahora Clarencehouse es señalada por plagiar símbolos de San Pablito y Pahuatlán

Los elementos fueron copiados de las figuras recortadas en papel amate que los artesanos hacen de los dioses de sus cultivos

 

Primero fue el gigante chino Shein, ahora la empresa Clarencehouse, especializada en decoración de interiores, es señalada por la Secretaría de Cultura federal de apropiarse de los elementos culturales que dan identidad a los pueblos indígenas otomíes de las comunidades de San Pablito y Pahuatlán, en Puebla.

Una segunda carta fue emitida por la dependencia que encabeza Alejandra Fraustro Guerrero, esta vez dirigida a la empresa Clarenhouse para pronunciarse en contra de la apropiación cultural indebida de elementos y característicos de la cultura de dichos pueblos otomíes.

Los elementos fueron copiados de las figuras recortadas en papel amate que los artesanos hacen de los dioses de cada uno de sus cultivos, los cuales se muestran en la línea de productos de vinil estampado en la colección Michelle Nussbaumer de Clarencehouse.

De acuerdo con la misiva publicada en las redes sociales de la Secretaría de Cultura federal, los elementos forman parte importante de la cosmovisión de la cultura otomí, misma que proviene de la época prehispánica que simbolizan deidades de la agricultura y una estrecha relación del hombre con la naturaleza.

Se explica que los artesanos poblanos elaboran con la corteza de un árbol endémico de la región, llamado jonote, el papel amate, con el cual elaboran figuras recortadas de los dioses de cada uno de los cultivos que siembran como parte de su sustento.

 

Entre estos productos se encuentran el maíz, chile, tomate, cebolla, cacahuate, café, plátano, guayaba, calabaza, entre otros, los cuales, antes de iniciar la siempre realizan rituales solicitando buenas cosechas.

Tal como acusó en la misiva dirigida a Shein el pasado viernes, por apropiarse indebidamente de elementos de los textiles de artesanos de San Gabriel Chilac, en esta nueva pugna por preservar, difundir y promover el patrimonio tangible e intangible del país, acusa a Clarencehouse de afectar económicamente a los artesanos de la región y de atentar contra sus credencias.

“Este diseño que ustedes están distribuyendo como papel vinil estampado con ‘diseño étnico’, no solo afecta económicamente a cientos de familias que se dedican a esta actividad, al no tener competitividad con marcas industriales. Además de los daños económicos hay daños morales y ceremoniales, ya que atenta contra las creencias, símbolos e identidad de un pueblo indígena”, subraya.

Además de expresar inconformidad por la apropiación indebida, en la carta se solicita se “explique públicamente con qué fundamentos privatiza una expresión cultural tradicional de propiedad colectiva, haciendo uso de elementos culturales cuyo origen está plenamente documentado”, señaló en un comunicado la dependencia federal.

De igual forma, expone que se trata de un principio de consideración ética que, local y globalmente, obliga a hacer un llamado de atención y poner en la mesa de la discusión