El viejo capitán observa la calma marina desde la orilla de una playa desierta. Esta vez, familiares y amigos se dieron cita en el barco para acompañar al músico a escuchar, nada menos que, el canto de las Sirenas. Guillermo Briseño —el viejo rockero que vive para cantarlo— y un grupo de cantantes, a saber: Marisol Portilla, María Veras, Nayeli Stanfield y Verónica Ruíz, presenta su nuevo material discográfico De sirenas y otros monstruos.
La poesía deja un aroma marino cuando el músico interpreta La voz de la Petenera, el primero de los 10 temas incluidos en este material publicado por el sello Ediciones Pentagrama. Modesto López, titular del sello discográfico, se enorgullece al decir a los asistentes que la compañía ha publicado la discografía completa del músico, circunstancia que facilita a los coleccionistas conseguir la obra de Memo Briseño.
“En la bahía, Pentagrama de Modesto López encontramos refugio”, responde cariñoso Briseño.
Las olas y el tiempo se llevaron el disco anterior en coautoría con León Chávez Texeiro, Ya no quedan muchos leones, donde reinterpretan las canciones del viejo cantautor de izquierda. Pero estos son otros aires y las cuatro jóvenes navegan con Briseño algunas versiones nuevas de temas conocidos y otras compuestas para su vigésimo disco.
Marisol Portilla recuerda los años en un barco llamado Escuela de Música del Rock a la Palabra, donde siempre hubo un aprendizaje, aunque a veces con tempestad, pero siempre con aprecio por la música y la inteligencia. Es el legado de Briseño, ya tiene 17 años —la escuela— y sigue dando frutos: músicas y músicas con un nivel que mejora con los años.
Los otros monstruos tienen nombre y apellido: Felipe Souza, Ricardo Jiménez, Juan Pablo González en estudio 13, con todo y piano Bösendorfer; Andrew Donaldson, Víctor Román, Paco Sánchez Loaeza, Octavio Victoria, Rodrigo Flores, Juan Sosa y Aurora Berlanga, esposa de Briseño, quien diseñó la portada del disco.
“Érase en el mar un mago que del sombrero sacó otros magos. Y fue que la mágica velocidad del torbellino lo arrastró a su vórtice y lo metió a su propio sombrero. Cada demiurgo, cada bruja aparecidos, hicieron lo suyo: desatar el talento y la intuición. Cada uno se seguirá escuchando y reconociéndose, sabiendo lo que trajo, lo que aportó. Tal vez el encanto permanezca y se conmuevan para que con toda lucidez dejen escapar su explicación de los cantos de las sirenas”, revela el disco.
Remando despacio, Briseño y las sirenas tomaron vuelo para compartir unas rolas con los presentes. Ladronzuela del mar, Callin You, Sopla la esperanza maya —canción que recomendó al presidente Andrés Manuel López Obrador, ahora que está haciendo su playlist— y A mí que no me cuenten, sonaron en La Titería, espacio donde fue convocada una conferencia de prensa con motivo de la presentación en sociedad del disco De sirenas y otros monstruos.
Ante la insistencia de la concurrencia, el músico mexicano tocó Dónde estabas, incluida en el clásico disco Briseño y el Séptimo Aire, una reversión a la se acoplaron perfectamente las sirenas y hasta el público ahí reunido.
El pianista aseguró que tiene en el tintero y en el estudio un buen número de piezas para lo que podría ser su siguiente trabajo, pues no publicaba un trabajo solista desde hace una década, mismo que tendría por nombre Ombligo de la Luna, también está pendiente el disco con los remanentes de toda su carrera que podría llamarse Sobras maestras.
Mientras eso sucede, merece la pena echarse un chapuzón en las profundas aguas de su más reciente trabajo De sirenas y otros monstruos, el cual, gracias a la tecnología y al trabajo de la disquera, se encuentra disponible en todas las plataformas, incluso las acuáticas.