El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, enfrenta una grave crisis política derivado de las acusaciones de acoso sexual que este lunes sumó tres. Una mujer lo acusa de haberla tocado indebidamente y pedirle un beso durante una boda en 2019, lo que impulsó que aumentaran las voces que exigen que renuncie o que se le inicie un juicio político en la Legislatura Estatal.
Las acusaciones se producen en medio de otro escándalo reciente, el de las muertes no informadas en hogares de ancianos por coronavirus, que están sacudiendo la reputación anteriormente sólida del gobernador de Nueva York.
La Asamblea Estatal de Nueva York limitó el uso de poderes de emergencia por la pandemia que tenía el gobernador y que caducaban el 30 de abril.
Según lo dispuesto este martes, el mandatario estatal únicamente mantendrá las directivas que ya estaban en marcha por un período de 30 días.
Esta medida fue tomada después de las críticas de los integrantes del propio partido de Cuomo por su manejo de la pandemia y el presunto intento de su administración de ocultar el número de muertes en los asilos de ancianos, algo que investigan autoridades estatales y federales.
A esos problemas se suman denuncias de mujeres que acusan al gobernador de acoso y comportamiento sexual inapropiado.
Investigación abierta
Este lunes, el gobernador habilitó formalmente a que se le investigue por las acusaciones. La fiscal general del estado, Letitia James, dijo que la oficina de Cuomo le concedió por escrito una autorización para realizar una pesquisa independiente.
“Esta es una responsabilidad que no tomamos a la ligera, por cuanto las acusaciones de acoso sexual deben tomarse siempre en serio”, dijo James en un comunicado.
La carta a James indica que los resultados de la investigación serán “revelados en un informe público”.
Hasta ahora, tres mujeres han hecho acusaciones sobre la conducta de Cuomo, incluida Anna Rauch, quien alegó que Cuomo le preguntó si podía besarla en una boda en 2019.
La acusación se produjo horas después de que la fiscal general de Nueva York, Letitia James, anunciara que Cuomo había autorizado una investigación sobre las denuncias de acoso sexual en su contra.
Anna Rauch le dijo al New York Times que Andrew Cuomo, a quien no había conocido anteriormente, puso sus manos en su espalda desnuda, antes de proceder a pedirle un beso.
Cuando ella le quitó la mano, recordó Ruch, el gobernador comentó que ella parecía “agresiva”, y le puso las manos en las mejillas. Preguntó si podía besarla, lo suficientemente fuerte como para que un amigo que estaba cerca lo escuchara. Ruch se alejó cuando el gobernador se acercó.
“Me sentí tan incómoda y avergonzada cuando en realidad él es quien debería haberse sentido avergonzado”, dijo Anna Rauch.
“Estaba tan confundida, conmocionada y avergonzada. Giré la cabeza y me quedé sin palabras”.
Las afirmaciones siguieron a las de Charlotte Bennett, una exasesora de salud de 25 años de Cuomo, quien habló sobre su experiencia el sábado.
Charlotte Bennett afirmó que se encontró con el comportamiento inapropiado de Cuomo en múltiples ocasiones, incluida una conversación en junio del año pasado, cuando le preguntaron sobre sus experiencias sexuales.
Andrew Cuomo, según las acusaciones en el Times, también comentó que estaba abierto a estar con mujeres de veintitantos años y preguntó si Charlotte Bennett "alguna vez había estado con un hombre mayor", mientras estaban solos dentro de su oficina.
“Comprendí que el gobernador quería acostarse conmigo y me sentí terriblemente incómoda y asustada”, dijo Charlotte Bennett. "Y me preguntaba cómo iba a salir de ahí y asumí que era el final de mi trabajo".
La trasladaron a otro puesto que no era con Cuomo y dijo que no pidió una investigación el año pasado porque “quería seguir adelante” de los encuentros y concentrarse en su nuevo trabajo.
Andrew Cuomo, respondió a las afirmaciones de Charlotte Bennett el sábado, diciendo al Times que él “nunca había hecho avances hacia Charlotte Bennett, ni tampoco tuve la intención de actuar de ninguna manera que fuera inapropiada”.
En otra declaración el domingo abordando las acusaciones hechas por Charlotte Bennett y otra ex asistente, Lindsey Boylan, el gobernador reconoció las acusaciones hechas en su contra.
“Reconozco que algunas de las cosas que he dicho se han malinterpretado como un coqueteo no deseado. En la medida en que alguien se sintió así, realmente lo lamento ”, dijo el gobernador.
Boylan hizo sus propias acusaciones de acoso sexual contra Cuomo el miércoles pasado, cuando escribió en una publicación en Medium, que el gobernador la besó en los labios después de una reunión en su oficina en 2018.
El encuentro inesperado, que fue uno de los números descritos por el hombre de 36 años, se produjo casi un año después de que la invitaran a jugar "strip poker" mientras viajaba en su avión estatal.
Boylan también describió momentos en los que Cuomo hizo todo lo posible para tocar la espalda o las piernas, y escribió: “Fue un sentimiento incómodo pero demasiado familiar: la lucha por ser tomado en serio por un hombre poderoso que ató mi valía a mi cuerpo y mi apariencia”.
Cuomo negó las acusaciones cuando se hicieron por primera vez en diciembre, pero ha visto renovados pedidos de su destitución o renuncia en los últimos días.
Legisladoras escandalizadas
En tanto, un grupo de seis legisladoras, de las catalogadas como socialistas, presentaron una carta conjunta este miércoles para apoyar que se inicie un ‘Impeachment’ en Albany en contra del mandatario estatal.
“Los relatos de acoso sexual de las mujeres que valientemente se han presentado confirman lo que muchos en Albany han sabido durante años: que el gobernador Cuomo usa su poder para menospreciar, intimidar y acosar a sus empleados y colegas, y esos relatos se suman a las recientes revelaciones de faltas graves”, dijo el grupo integrado por las senadoras Julia Salazar y Jabari Brisport, y las asambleístas Emily Gallagher, Phara Souffrant Forrest, Zohran Mamdani y Marcela Mitaynes.
Las legisladoras pidieron una acción contundente: “Es hora de que la Legislatura exija rendición de cuentas. Los procedimientos de juicio político son la vía apropiada que tenemos para responsabilizar al Gobernador por sus muchos abusos de poder y destituirlo de su cargo”.
La lista de quienes que solicitan que dimita está creciendo, incluyendo no solo a políticos de su partido, sino a varias organizaciones y activistas de la ciudad de Nueva York, como el "NY Working Families Party" que en un comunicado emitido este miércoles por su directora Sochie Nnaemeka pidió: “Hacemos un llamado al gobernador Cuomo para que renuncie de inmediato porque no es apto para servir al pueblo de Nueva York”.
El texto agrega que los horrorizó “enterarse del patrón de acoso sexual del Gobernador. Nos ha inquietado igualmente su respuesta: no negó ninguna de las acusaciones específicas de Charlotte Bennett, no asumió ninguna responsabilidad personal por sus acciones y, en cambio, culpó a sus víctimas”.
Entre tanto, la organización "New York Communities For Change" también indicó en otro comunicado que le “creemos a Lindsey Boylan, Charlotte Bennett, y Anna Ruch”.
Las acusaciones de acoso sexual se producen pocas semanas después de que la Administración Cuomo admitiera haber ocultado información crítica, incluidas la cifras de miles de muertes por Covid-19 en hogares de ancianos, al público y del Fobierno federal. Ese acto, por sí solo, del Gobernador fue catalogado por legisladores estatales como suficiente para justificar el inicio de un juicio político.
