La entrega de despensas a beneficiarios por duplicado y la falsificación de nombres, folios y evidencia fotográfica de esta base de datos durante la pandemia, son hechos que, en entrevista, denunció de Faryani Yaret Miranda Uribe, analista del Departamento de Inclusión Laboral de la Dirección de Atención a Personas con Discapacidad, del Sistema DIF Municipal, de la administración de la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco.
De acuerdo con la exfuncionaria, personal de la dependencia infló los costos de las despensas, además de que, en algunos casos, contenían productos descompuestos.
También, dijo, se falsificaron folios y testigos fotográficos, para ocultar el limitado alcance del programa.
Faryani fue despedida recientemente de la administración capitalina, bajo el argumento de recorte de personal.
En entrevista, denunció que en área donde trabajó durante seis años -pues venía de la anterior administración-, presenció anomalías como acoso laboral, improvisación de los directivos, maltratos, el maquillaje y engordan los precios de las requisiciones de productos, entre otras.
A los empleados del DIF Municipal, al mando de Mayté Rivera Vivanco, presidenta del DIF municipal y hermana de la alcaldesa, se les ocupó para armar las despensas, sin proporcionarles cubrebocas o caretas, aunque se supone que, para esa labor, se contrató a una empresa.
Cuando quedaban unas cuantas despensas, el director del Centro Municipal de Equinoterapia y Rehabilitación del DIF, que se usó como bodega (CMERI) pidió a los trabajadores que buscaran a sud familiares o amigos para recogerlas.
“Se entregaron alimentos en descomposición, como naranjas, zanahorias y papás. Nos hicieron limpiar las que todavía servían y así se entregaron; muchos productos se echaron a perder, es lo que yo vi en el CMERI”, agregó.
Faryani Yaret Miranda Uribe.
Según la joven de 29 años, los paquetes entregados tenían sobrecosto, pues productos que alcanzaban un costo de 200 pesos, fueron reportados con erogaciones superiores a los 450 pesos por unidad.
“Hasta la fecha, sé que siguen tratando de arreglar la base de datos, la evidencia fotográfica, porque no concuerdan. En las imágenes sale la persona con una hojita y con plumón la hoja (con el folio) y a veces no coincidían, pues ‘vamos a hacerlas coincidir’, porque eso nos ponían a hacer, por eso nos quedábamos hasta las siete u ocho de la noche, arreglando su base de datos”.
Sobre la duplicación de folios, Faryani comentó que eso ocurrió con los nombres de las personas y como a algunas se les pasaba tomarse fotos, personal del DIF se tomaba las fotos con las despensas.
La falsificación
Egresada de la carrera de comunicación por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), Faryani Yaret Miranda Uribe teme por su seguridad.
Asegura que no tiene filiaciones partidistas, aunque trabajó en la administración de Rafael Moreno Valle, como integrante del pull de prensa que acompañaba a los reporteros en las giras, y luego llegó a DIF, con la administración de José Antonio “Tony” Galy Fayad, y luego con su sustituto en la alcaldía, Luis Banck Serrato.
Su trabajo en el Departamento de Inclusión Laboral de la Dirección de Atención a Personas con Discapacidad del DIF Municipal le dio, dice con contundencia, muchas satisfacciones, pues durante la anterior administración se pudo conseguir trabajo a muchas personas.
Había, entonces, mucho dinamismo en esa dirección, pero hoy ni una sola idea nueva se ha presentado. La administración de Claudia Rivera Vivanco, a través de su hermana, Mayté, cabeza del DIF, sigue montada en todo lo que hicieron Gali y Banck, a pesar de que la inclusión y el feminismo son banderas de la actual alcaldesa.
“No hay sensibilidad, no saben lo que es un servidor público.
Luego del aviso de su despido, el 14 de julio pasado, recibió de Recursos Humanos pretendían que firmara una carta en la que aceptaba rebeldía y faltas que nunca cometió, asegura.
Hace unos días regresó por los 14 mil pesos que le dieron por seis años de trabajo en la dependencia. Ni siquiera pudo pasar por sus cosas. Un policía se las llevó hasta la puerta. “Me trataron como una delincuente, con la punta del zapato, como si yo le debiera algo al DIF”.
-¿Qué sabor de boca te queda de la administración de las hermanas Rivera Vivanco?
-Yo le escribí a Mayté el día jueves (cuando fue por sus cosas) y le dije que me voy muy decepcionada de esta administración, porque las personas que tienen al lado no tienen ni idea qué es ser un servidor público. Decepcionada, enojada, triste, porque nuestra Puebla está mal, muy mal.
En la sala de su casa, una de clase media como cualquier otra de Puebla capital, Faryani Yaret hace una relatoría larga de todo lo que vio y vivió.
Su celular es su mejor escudo probatorio. Contiene audios, conversaciones, fotos y videos de todo lo que expone.
Mientras da la entrevista, sus hijas juegan alrededor y su esposo en el comedor, a unos pasos, trabaja en una computadora al lado de su otro hijo.
-¿Eres misógina?
-No. Ellos sí.
-¿Eres parte del patriarcado que descalifica a las mujeres?
-No, pero creo que ellos sí. Yo hablo de lo que a mí me pasó, mi experiencia, todo está comprobado, aquí (señala el celular) tengo pruebas de lo que digo… Yo me voy muy tranquila, de que yo hice mi trabajo.
