• 13 de Mayo del 2024

López-Gatell: peñismo convirtió la salud en “aventura comercial”

El subsecretario de Salud en Cuetzalan / José Castañares / Agencia EsImagen.mx

Reitera el subsecretario de Salud que no le interesa la política “hasta que yo no entregue todas las cuentas y se acabe esta epidemia”

 

El coctel de corrupción, negocios oscuros al amparo del poder, intereses comerciales, desmantelamiento del sistema público de atención que se dio en el sexenio peñista, entre 2012 y 2018, sumado a la mala salud de los mexicanos, con pésimas determinantes que vienen desde hace 40 años, explican la dimensión y mortalidad que en el país está dejando “esta grande y grave” pandemia del Covid-19, describe Hugo López-Gatell Ramírez, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.

Por enésima vez el funcionario que es la cara visible del Gobierno de México en el manejo de esta crisis de salud se descarta para las boletas y para el contexto electoral.

Sin embargo, en entrevista en solitario lo hace con palabras que pueden tener varias lecturas: “hasta que yo no entregue todas las cuentas necesarias y se acabe esta epidemia, no tengo otro elemento de prioridad que el manejo de la epidemia y el resto de mis obligaciones en la protección de la salud pública de este país. Estoy encomendado a lo técnico”.

Al finalizar su conferencia diaria, esta vez desde la ciudad de Puebla, a la que acudió con una amplia comitiva de funcionarios federales, para presentar la Estrategia de Intervención Local de Salud Comunitaria, Hugo López-Gatell se da el tiempo para atender la conversación que fue pactada con su equipo en la Ciudad de México.

Eso sí, aprovecha para hacer una acotación general, sobre su encargo: no tergiversará los datos, aunque lleguen malas noticias.

De ahí que desdeñe las críticas de la oposición al actual gobierno y sus exigencias de que renuncie, porque “nuestro interlocutor es el pueblo de México, con quien estamos obligados a darle información directamente sobre lo que está ocurriendo en la epidemia… Cuando esa información es alentadora, lo vamos a decir, cuando no es alentadora y estamos ante un reto, se lo vamos a decir también y se lo hemos estado diciendo”.

 

Exilio adentro

La entrevista. (Estudio Zalamandra)

 

La evocación a la izquierda

En el Centro de Convenciones de San Francisco, un salón desocupado, aledaño a “La Constancia”, donde fue el encuentro con medios, sirve al fin con el reportero.

La mirada del funcionario se ilumina cuando se le hace una referencia de conocimiento común del político de izquierda Javier González Garza, el matemático que es ícono de la lucha social urbana de los años 60 y 70 y luego, entre muchas otras cosas, coordinador del Grupo Parlamentario del PRD en la LX Legislatura (2006-2012). Es de sus mayores afectos. El abundante cariño es mutuo, confiaron desde sus dos contextos personales.

Tras el recuerdo del “Güero” González Garza, el subsecretario Hugo López-Gatell se siente más en casa.

Toca el tema del combate a la mala alimentación, que ha derivado en muchas muertes en México y nos tiene en los primeros lugares en diabetes e hipertensión.

Denuesta los refrescos embotellados. Dice, como ejemplo, que son determinantes en 7 por ciento de las más de 40 mil muertes que anualmente ocurren en el país. Eso explica el adjetivo de “veneno” que les ha endilgado hace unas semanas.

La charla amplia, para su escaso tiempo, va de los rezagos en atención de otras enfermedades, por la crisis de Covid, al atraso legislativo en las leyes de Salud.

Pisa también el terreno de la opinión de su exposición mediática y de política, pero sus respuestas tienen un énfasis especial sobre las causas del debilitamiento del sistema de salud y el señalamiento de la corrupción y los negocios, que se realizaron en el sexenio de Enrique Peña Nieto.

Nunca menciona por su nombre al ex mandatario, pero en cambio en tres ocasiones les pone fechas a los hechos de “corrupción, aventuras comerciales, intereses económicos, negocios oscuros” que hoy repercuten en la capacidad de respuesta ante la pandemia: 2012 a 2018.

 

 

Las huellas del peñismo

La fluidez de sus conferencias se reedita en la conversación en solitario. Pero esta vez abunda en señalamientos específicos: hubo negocios de capitales privados al amparo del poder público que malograron la posibilidad de afianzar un sistema de salud que pudiera hacer frente con mayor agilidad a esta pandemia.

“Desde que empezó el modelo del Seguro Popular, en 2003, y durante estos 15 o ya 16 años, de que estuvo en vigor, hoy ya ha sido desmantelado, se nos planteó que esa manera de organizar el sistema de Salud y de financiarlo, iba llevar a inversión privada que enriquecería la capacidad del sistema en términos de cobertura, de calidad.

“No fue así, se redujo la capacidad efectiva del sistema, porque no se invirtió correctamente en ampliar su capacidad, y en darle mantenimiento a las unidades de salud, para que fueran resolutivas.

“Se dejaron abandonados, y esto tiene que ver con fenómenos importantísimos de corrupción, más de 317 hospitales que se planteó construir y quedaron en obra negra o inservibles.

“Y además se fomentó la participación de los agentes comerciales de la salud, que, en vez de desarrollar capacidades resolutivas, es decir, infraestructura útil, lo que hicieron fue hacer negocios al amparo del poder público y con ello sustrajeron los recursos, de por sí en general escasos, que año con año la Cámara de Diputados destina, a través del Presupuesto de Egresos de la Federación, para la Salud”.

 

Castañares

López-Gatell en Cuetzalan. (José Castañares / EsImagen.mx)

 

Aventuras comerciales

Este modelo de “aventuras comerciales” en el sexenio pasado terminó por impactar en la salud de los mexicanos y obligaron al actual gobierno a sortear muchos obstáculos.

“¿A cambio de qué (fue la entrega de recursos del erario)? -plantea la interrogante Hugo López-Gatell y de inmediato él da la respuesta-: a cambio de ciertas aventuras comerciales que tenían la idea de ser servicios, que le llamaban integrales, que de una manera muy oscura eran contratados por el gobierno federal, insisto, 2012-2018, y que en realidad no resolvían los problemas de fondo, que pagaban redujo la capacidad efectiva del sistema y dejaron en indefensión sobre todo a las poblaciones más vulnerables, en el área rural, las poblaciones indígenas, entre muchos otras”.

Mala salud, mal gobierno

La precariedad del sistema de salud, sin hospitales, sin medicamentos y sin personal, no fue la única calamidad. La mala salud de los mexicanos, con 14 por ciento de la población con diabetes, muchos también con hipertensión, es otro factor determinante, que nos encontró frágiles en el país, a la llegada del Covid, cuyo primer caso en México se detectó el pasado 28 de febrero.

El subsecretario de Salud también ve la mano de la corrupción y de los intereses económicos, en la mala alimentación de los mexicanos.

Hugo López-Gatell Ramírez considera una falacia el supuesto de que podemos comer lo que deseemos, porque hay determinantes circunstanciales y ajenas, en las que el Estado mexicano claudicó en su obligación constitucional de vigilar y fomentar la buena salud.

Fracasó, desde hace al menos cuatro décadas, pero también lo permitió y se corrompió, para que esto ocurriera.

“Los alimentos que nos llevamos a la boca no dependen sólo de nuestra voluntad. Uno podría pensar, y esto es lo que nos han hecho creer quienes no quieren que veamos la realidad, que las decisiones sobre lo que nos alimentamos es libre, que lo que queremos comer lo comemos. No es cierto, esto está determinado socialmente.

“En primera por la capacidad económica y México tiene una enorme desigualdad socioeconómica, la mitad de la población mexicana vive en condiciones de pobreza, la mitad, y esto obviamente dificulta el acceso, en términos económicos, a una alimentación saludable.

“Segundo lugar, lo que físicamente tenemos a la mano, si salimos a la calle, vivamos en una zona urbana, suburbana o rural, vamos a encontrar mayormente productos ultraprocesados y procesados, que son productos de consumo, aparentemente, alimentario, pero que no podríamos llamarles formalmente, alimentos porque no lo son”.

Y el resultado está a la vista: “estos determinantes, que son las causas de estas enfermedades (diabetes e hipertensión), en México desde hace más de 35 o quizá 40 años, han tenido un deterioro progresivo. Esto es lo que explica esta grande y grave epidemia. Cuando digo una de las más, es por qué México es, por ejemplo, el primer país en obesidad infantil y juvenil. A veces llegó a ser el primero, por momentos es el segundo o tercero, en obesidad en adultos”.

Las cifras son contundentes: “¿de qué tamaño es esta epidemia?, tres cuartas partes de la población mexicana, de quienes tienen 20 años o más, tienen sobrepeso o bien obesidad. Tenemos también a la cuarta parte de la población con hipertensión y hasta 14 por ciento tiene diabetes, lo conozca o no lo conozca y ese es otro de los problemas: el retraso en el diagnóstico.

“Son enfermedades que progresan lentamente, sin dar ninguna molestia, la persona no lo percibe y cuando lo percibe es porque ya tiene una complicación generalmente irreversible: un infarto, ceguera amputación, porque no es circulación en las piernas, insuficiencia renal o la muerte misma”.

-Renunció, con estos gobiernos, el Estado a su responsabilidad…

-Efectivamente. Es una responsabilidad del Estado, se requieren políticas de Estado. Respecto del gobierno, como parte del Estado, como ente tutelar del Estado nacional, lo que hay es una obligación, en términos constitucionales, por el derecho a la protección de la salud, el derecho al acceso al agua y el derecho a una nutrición saludable…

“El gobierno es responsable de presentar esas políticas, de implantarlas y de vigilar su cumplimiento, protegiéndolas, además, de la penetración de los conflictos de interés económico que por años las han distraído, debilitado, estorbado o desmantelado”.

Sobreexposición mediática

Han trascurrido casi 25 minutos. El funcionario debe encontrarse con la comitiva, en la que también está Zoé Alejandro Robledo Aburto, director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), un sobreviviente del Covid y recientemente también de un percance automovilístico en Chiapas, en donde hace tres semanas comenzaron estas giras.

Con él es con quien más platicó tras la conferencia y antes de la entrevista. De paso, saludó a un grupo de médicos jóvenes, que estuvo a cargo en la revisión de los asistentes, en ese salón “La Constancia”.

Hugo López-Gatell mira el reloj, pero no apresura el final de la charla. Es viernes en la noche y el sábado la visita continúa en Cuetzalan, en donde los funcionarios del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador se entrevistarán con integrantes de la cooperativa indígena Tosepan Titataniske.

Queda una pregunta más.

-¿No se siente incómodo con esta sobreexposición mediática (por ser la voz en la estrategia contra el Covid)?

-Yo estoy cumpliendo la responsabilidad, la encomienda y el encargo que me corresponde por ley, y que me han conferido el Presidente de la República y el secretario de Salud. En la medida en que mi trabajo pueda ser útil a la sociedad, yo lo estaré desempeñando. Si en algún momento, eso implica esta sobreexposición mediática, debemos tener en cuenta que es una decisión del gobierno mexicano la transparencia en la información.

“Nuestra responsabilidad es informar diariamente. Somo unos de los pocos países que aún mantiene este tipo de conferencias de prensa, con el propósito de que la sociedad conozca, de manera veraz, la información técnica, la información científica sobre lo que está ocurriendo con la pandemia. Nuestro interlocutor o nuestra audiencia es el pueblo de México, con quien estamos obligados a darle información directamente sobre lo que está ocurriendo en la epidemia.

“Y hemos insistido en una cosa, cuando esa información es alentadora, lo vamos a decir, cuando no es alentadora y estamos ante un reto, se lo vamos a decir también y se lo hemos estado diciendo.

“Tenemos la obligación de actuar con veracidad y de informar con oportunidad y lo seguiré haciendo, por lo demás, es lo de menos”.

 

Es imagen interiores

El recorrido en la sierra poblana. (José Castañares / EsImagen.mx)