Santiago Xalitzintla, Puebla.- La vida de esta comunidad transcurre con calma, inmutable, con la paciencia ancestral de saberse tan cercana al Popocatépetl, pero también de tener el “respeto” del volcán, que en las últimas semanas ha retomado su actividad de expulsión de ceniza y materiales, con una enjundia que no se veía desde hace al menos un lustro.
Los ojos de los viejos que se reúnen al zocalito de esta junta auxiliar del municipio de San Nicolás de Los Ranchos se entusiasman de ver tantos forasteros, quienes llegan sorprendidos del paisaje nebuloso por el polvo fino que cae y que se excitan con la posibilidad de más explosiones.
Apenas la noche del domingo y la madrugada de este lunes, Don Goyo, como lo conoce la memoria popular, ha estado roncando durante cinco horas y a ratos ha tenido estallidos.
Las ventanas de las casas lo sintieron. No es tan fuerte. Es más como cuando tiembla leve, dice una mujer que en su estanquillo vende tacos a los fuereños.
El gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina encabeza, con la titular de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), Laura Velázquez Alzúa, un recorrido por la Ruta 2 de desalojo, para verificar las condiciones y fortalecer las medidas preventivas.
Más mujeres que hombres, más adultos mayores que jóvenes y algunos niños y niñas de la comunidad se arremolinan en torno al acto que las autoridades de los tres niveles de gobierno encabezan, en la sede de la presidencia auxiliar.
“No pasa nada”
El poblado ha estado en calma. No hay miedo, coinciden muchos. Los de mayor edad, recuerdan con confusión en las fechas, que ya ha ocurrido en dos ocasiones el desalojo.
Que los llevaron a las Cholulas a albergues temporales, que muchos no se quisieron ir entonces, pero que, al cabo de un tiempo breve, regresaron, porque “no pasa nada; tiene su boquete donde expira”, cuenta la señora Elena Castro, lo que es la certeza colectiva.
Con más de ocho décadas de una vida que vio la luz aquí, ella lleva aún en la memoria que han sido dos veces los desalojos. También, que varios de sus paisanos no quisieron salirse, entonces. Y vuelve a rematar: “no pasa nada”. Pero esta vez también admite: “a veces sí nos asusta”.
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— exilio_mx (@MxExilio) May 23, 2023
La presencia de funcionarios y reporteros irrumpe en la vida silente de esta comunidad, pero sus habitantes los reciben con entusiasmo. Hasta los canes salen a recibir a los convoyes de militares y Guardia Nacional, que tienen rondines en el marco del Plan DN-III-E.
Los lugareños se mezclan con los ajenos y unos y otros se miran con curiosidad. Es un paisaje que se les ha repetido cíclicamente desde 1994, cuando el 21 de diciembre se reactivó con una erupción violenta la actividad del volcán que permaneció dormido por mucho tiempo.
Escuchan con atención los discursos de las autoridades, que les ofrecen respaldo permanente, información certera y que, si es necesario desalojar, haya seguridad y rapidez, para el resguardo de las vidas, dice la titular de la CNPC, Laura Velázquez.
El respeto de Don Goyo
Entre los visitantes, se acomodan los hijos de este municipio. Son anfitriones también de alcaldes de municipios cercanos.
El Popocatépetl este lunes se ha escondido entre la nubosidad que han provocado sus propias cenizas y sus exhalaciones de gas y vapor.
Al arranque aquí del recorrido de supervisión, el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina reitera que hay alerta, pero no hay alarma.
Alrededor de la tribuna y mampara que se han dispuesto para el acto, mucha gente se acerca sin restricciones. Una mujer de edad, con cubrebocas, a ratos escucha de pie, apoyada en su bastón; otros, lo hace sentada, en una de las escaleras de la presidencia auxiliar.
Algunos niños juguetean cerca y hasta algunos lomitos andan por ahí, entre las fuereñas visitas.
Céspedes Peregrina informa que las rutas están en buen estado. Y al rematar su participación, lanza frases directas, de agradecimiento, de respaldo y empatía:
“Estoy seguro que vamos a salir de esta. Puebla es muy fuerte, México es muy fuerte. Y yo sé que nuestro volcán, al final de cuentas, por muchos años nos ha dado cobijo, y hoy nos seguirá dando cobijo y seguirá respetando a todos los hijos de esta región”.
Varios integrantes del gabinete acompañan a Sergio Salomón Céspedes: está la titular de Desarrollo Rural (SDR), Ana Laura Altamirano Pérez; la secretaria de Educación, María Isabel Merlo Talavera; de Bienestar, Lizeth Sánchez García.
También el secretario de Salud, José Antonio Martínez García; del Trabajo, Gabriel Biestro; de Cultura, Sergio Vergara Berdejo; de Infraestructura, Luis Roberto Tenorio García. Hay más y también funcionarios federales.
La posible evacuación
Como coordinador de las acciones en torno a la actividad volcánica, el titular de la Secretaría de Gobernación, Julio Miguel Huerta Gómez, toma la palabra en primer lugar en el acto, antes del arranque del recorrido.
En tono enfático, llama a medios de comunicación a ser precisos con información. Pide a los ciudadanos evitar el pánico, pero también la temeridad, respecto del Popocatépetl; advierte que uno y otra conducta pueden ser negativas.
Advierte que no habrá evacuación, a menos que el Semáforo Volcánico llegue a Rojo Fase 1 (actualmente está en Amarillo Fase 2). De requerirse, en esa condición será solamente para seis comunidades.
“Probablemente, no lo sabemos, tal vez entremos a la Fase Rojo Número 1, que consistiría, hasta ese momento, hasta que se declare esa nueva fase… procederíamos a evacuar seis comunidades, que pertenecen a los municipios de Tochimilco, Atlixco y San Nicolás de Los Ranchos. Solamente hasta entonces, amigas y amigos.
“Mientras tanto, nosotros seguimos con ese proceso de preparación profunda, en la que están inmersas las dependencias del gobierno del estado… Siempre pidiendo, sugiriendo, dos cuestiones que son fundamentales. La primera de ellas y es para nuestros amigos y amigas de los medios de comunicación, ser muy precisos en lo que hacemos conocer y saber a nuestras comunidades, y a nuestros pueblos.
“Y segundo: ser muy prudentes, amigas y amigos, poblanas y poblanos todos, no solamente de esta junta auxiliar y de estos tres municipios, sino de todo el estado, a ser muy cuidadosos, estar muy atentos, hacer un llamado en este momento a la calma, nunca está de más…
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“Evitemos dos situaciones que pueden poner en riesgo la integridad de las personas y de los niños, la primera es el pánico… y la segunda, evitar la temeridad, porque tan malo es tener miedo, como no tenerlo”, subraya Julio Huerta.
Resaca de una boda
La población delata todavía los resabios de una boda que, por todo lo alto y con lujo en los usos y costumbres, comenzó a celebrarse el jueves pasado y que aún, la madrugad del domingo, era ocasión para el festejo y el libado de tequila y cerveza.
Juan Sandoval, quien roza los 50 años, dice con orgullo que se trató del festejo por el enlace de su sobrino. Se dispusieron “un toro, 200 cartones de cerveza, 30 pollos y 20 guajolotes”. La fiesta fue para casi todo el pueblo, “familiares, amigos y alguien que se acercara” a pedir una bebida o un taco.
La atención de los pobladores está en sus actividades cotidianas, en la vida que trascurre sin sobresaltos, a pesar de la actividad de Don Goyo.
La resaca por la boda y la parsimonia de Santiago Xalitzintla resumen su ánimo.
El volcán ronca en las noches; arroja ceniza, vapores y materiales.
La vida aquí sigue imperturbable, sencilla y cotidiana.