Inició este lunes con el respeto del comercio del Centro Histórico a las medidas de contención de coronavirus del Semáforo Rojo, solo abrieron comercios esenciales, con la venta de alimentos para llevar.
Desde temprana hora la actividad en la ciudad fue la de días anteriores, con poca gente en los paradores del transporte público y sus unidades, además de un tráfico vehicular moderado.
Los primeros comercios en abrir fueron bancos, cafeterías y algunos restaurantes y fondas del primer cuadro de la ciudad y la periferia.
Así mismo se pudieron apreciar algunos puestos del comercio informal de tamales y jugos, para el desayuno de las personas que acudieron a laborar o hacer actividades en el centro capitalino.
Otro punto de actividad es el Palacio Federal, en la oficina de Correos y Telégrafos, donde las personas de la tercera edad comenzaron a hacer fila para obtener sus pensiones.
En cuanto a los comercios de Los Portales del Zócalo, solo abrieron sus puertas restaurantes y cafeterías como McDinald's, Carl's e Itallian Coffee.
A las afueras, un grupo de patrullas y elementos de la Policía Municipal se apostaron para apoyar en los operativos a las secretarías de Protección Civil y Gobernación para impedir la aglomeración de personas en comercios no esenciales, así como evitar la venta de bebidas alcohólicas en botella abierta.
En cuanto a la plancha del Zócalo, las personas ya retiraron totalmente las cintas de seguridad colocadas para evitar que las personas las utilicen frenar los contagios por COVID-19.
El mismo caso ocurrió con las bancas del Paseo Bravo, dónde desde temprana hora, se registraron personas haciendo ejercicio y transitando por sus laderas.
En cuanto a la Avenida Juárez, la situación fue la misma del primer cuadro, solo abrieron bancos y algunos comercios con venta de alimentos solo para llevar, con poco tráfico vehicular.
