La Cumbre de Líderes del G20 inició este lunes en Río de Janeiro con el lanzamiento de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, una iniciativa promovida por el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, que cuenta con 147 miembros fundadores, incluidos 81 países y 24 organizaciones internacionales.
La presidenta Claudia Sheinbaum fue recibida por Lula da Silva en el Museo de Arte Moderno, donde se desarrollan las sesiones del G20. En su llegada, destacó que abordará temas como el combate a la pobreza, el hambre y el cambio climático.
Entre los líderes internacionales que asistieron a la cumbre figuran Pedro Sánchez, presidente de España; Gabriel Boric, presidente de Chile; y António Guterres, secretario general de la ONU. Todos ellos respaldaron la alianza, a excepción de Argentina, cuyo presidente Javier Milei rechazó la agenda de desarrollo sostenible que la iniciativa busca impulsar.
Alcances de la Alianza Global
La Alianza incluye compromisos asumidos por unos 70 países y organizaciones internacionales para desarrollar 40 proyectos específicos, como transferencias de renta para 500 millones de personas y programas de alimentación escolar para 150 millones de niños. Entre las propuestas destacan:
- Transferencias de subsidios en Burundi y Togo para beneficiar a 1.5 y 1.24 millones de personas, respectivamente.
- Un programa de alimentación para 82.9 millones de estudiantes en escuelas públicas de Indonesia.
Entre los miembros fundadores están nueve instituciones financieras internacionales, como el Banco Mundial y el BID, así como 31 organizaciones filantrópicas, incluidas las fundaciones Rockefeller y Bill & Melinda Gates.
Mensaje de Lula da Silva
Lula subrayó la urgencia de atender a los 733 millones de personas que sufren hambre, según datos de la FAO de 2023. En un mensaje dirigido a los líderes, declaró:
"Mientras haya familias sin comida en la mesa, niños mendigando en las calles y jóvenes sin esperanza de un futuro mejor, no habrá paz. Sabemos que una serie de políticas públicas bien diseñadas tienen el potencial de acabar con el flagelo del hambre".
La presidencia brasileña del G20, que concluye en diciembre, busca consolidar esta iniciativa como un legado antes de que Sudáfrica asuma la dirección del foro en 2024. Lula llamó a los países a intensificar esfuerzos para cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible antes de 2030:
"El tiempo para alcanzar las metas de desarrollo sustentable hasta 2030 se nos agota. Esta es la última oportunidad que tenemos para lograrlo".