El presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su satisfacción por el trato respetuoso recibido por parte de Claudia Sheinbaum durante el proceso de transición presidencial. Destacó que su sucesora no buscó distanciarse ni desacreditar su administración, lo que, según él, es algo inusual en este tipo de procesos.
“Me voy muy contento porque voy a entregar la banda presidencial a una mujer excepcional, una humanista llena de amor, humildad y buenos sentimientos. Es difícil encontrar en la historia una transición como la que estamos viviendo”, declaró López Obrador en un evento reciente.
El mandatario también destacó que la relación con Sheinbaum se mantuvo respetuosa hasta el final, lo cual, dijo, es un reflejo de la gran calidad humana de la presidenta electa. “Me siento muy satisfecho por el trato de la presidenta hacia mí, respetuoso hasta el final, lo que demuestra su gran condición humana”, comentó.
López Obrador contrastó este comportamiento con lo que él cree que hubiera sucedido en otras circunstancias: “Cualquier otro acomplejado, hombre o mujer, lo primero que hubiera hecho sería negarme o empezar con indirectas para cuestionar lo que hemos conseguido entre todos, buscando diferenciarse o con golpes espectaculares. Si se acuerdan de la historia de las sucesiones, es común que la gente busque marcar distancia para decir: ‘ahora sí viene el cambio’”.
El presidente recalcó su optimismo sobre el futuro del país bajo la presidencia de Sheinbaum, afirmando que México tendrá una gestión exitosa bajo su liderazgo. “Estoy seguro de que le va a ir muy bien a nuestro país y a nuestro pueblo con la próxima presidenta”, afirmó.
Otro aspecto que López Obrador valoró fue la decisión de Sheinbaum de continuar con las conferencias matutinas, un formato que ha sido característico de su mandato. “Me da muchísimo gusto que continúe este ejercicio de auténtica comunicación, de mensajes de ida y vuelta, como lo ofreció la presidenta electa Claudia Sheinbaum”, comentó.
La transición entre López Obrador y Sheinbaum, además de ser significativa por ser entre dos figuras clave de la política mexicana, destaca por el respeto y la continuidad en la comunicación y la administración, factores que, según el presidente saliente, auguran un futuro positivo para México bajo la próxima administración.