La detención de Pavel Durov, multimillonario franco-ruso de 39 años, marca un desarrollo significativo en una investigación en curso sobre el uso de Telegram para actividades delictivas.
La policía francesa ejecutó la orden de arresto emitida por la agencia de prevención de la violencia contra los menores (OFMIN) mientras Durov llegaba al aeropuerto Le Bourget, en las afueras de París, después de viajar desde Bakú, Azerbaiyán.
La investigación preliminar le imputa varios delitos graves, incluyendo fraude, tráfico de drogas, ciberacoso, crimen organizado y promoción de terrorismo.
Durov, que fundó Telegram en 2013 junto a su hermano Nikolái, ha sido criticado por permitir que su plataforma sea utilizada con fines ilícitos.
Telegram, conocida por su enfoque en la privacidad, ha sido objeto de controversia debido a su uso por parte de grupos extremistas como ISIS para difundir propaganda y coordinar actividades terroristas.
Además, la falta de moderadores y requisitos estrictos para la creación de cuentas ha facilitado la venta de drogas y bienes prohibidos.
La investigación ha puesto de relieve que Telegram puede ser un epicentro de actividades ilícitas, desde el tráfico de drogas hasta la piratería y la venta de datos personales.
Durov, cuya fortuna está valorada en 15 mil 500 millones de dólares según Forbes, enfrenta una serie de cargos en el tribunal que podrían tener repercusiones significativas para él y para la plataforma.
Las tensiones políticas y la creciente presión internacional podrían afectar el futuro de Telegram y sus políticas de moderación.