El huracán Beryl, de categoría 5, avanzaba el martes por el Caribe, causando estragos en varias islas y emitiendo alertas en regiones cercanas. Este fenómeno meteorológico ha dejado al menos cuatro muertos y ha generado preocupación en Jamaica y las Islas Caimán, que se encuentran en su trayectoria.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) informó que, aunque se espera que Beryl comience a perder intensidad, seguirá siendo una amenaza significativa con vientos y marejadas ciclónicas potencialmente mortales.
El primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, instó a la población a tomar precauciones sin caer en el pánico. Jamaica ha emitido una alerta por huracán y se están tomando medidas para preparar a la población, especialmente en áreas propensas a inundaciones. Las Islas Caimán también han sido alertadas y se espera que el huracán pase cerca de ellas el jueves.
Beryl tocó tierra en el sureste del Caribe, afectando gravemente a Granada, San Vicente y las Granadinas. En Granada, las islas de Carriacou y Petit Martinique sufrieron los mayores daños. El primer ministro granadino, Dickon Mitchell, describió la situación como desoladora, con una destrucción casi total de viviendas y edificios, y la falta de electricidad complicando aún más la situación.
El secretario ejecutivo de la Secretaría de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, Simon Stiell, originario de Carriacou, señaló que la crisis climática está empeorando y avanzando más rápido de lo esperado. Este huracán, el más temprano de categoría 5 en la historia del Atlántico, se ha visto intensificado por las inusualmente cálidas aguas del océano, un claro indicio del impacto del cambio climático.
Equipos de rescate están trabajando para evaluar y abordar los daños causados por Beryl. En Carriacou, un equipo de emergencia se ha desplazado para ofrecer asistencia, ya que muchas casas y negocios han sido destruidos. Las autoridades de San Vicente y las Granadinas también están trabajando para reconstruir y proporcionar ayuda a los afectados.
Beryl ha establecido varios récords, incluyendo ser el huracán de formación más oriental en junio en el Atlántico tropical. Según el NHC, la temporada de huracanes de 2024 podría ser excepcionalmente activa, con entre 17 y 25 tormentas con nombre y al menos cuatro grandes huracanes. La NOAA también ha advertido sobre una temporada extraordinaria debido a las cálidas temperaturas del océano y las condiciones de La Niña.
Beryl ha dejado una estela de destrucción a su paso, destacando la creciente frecuencia y severidad de los fenómenos meteorológicos extremos asociados con el cambio climático. Las autoridades continúan monitoreando la tormenta y tomando medidas para proteger a las comunidades vulnerables en su camino.
