Dominique Martin vive en la Guyana Francesa desde hace más de 30 años. Es director de la revista de poesía y arte Mitaraka.
Publicó 5 poemarios y relatos cortos en varios editores.
Participa a revistas internacionales. Es autor de prólogos y presentación de pintores y participó por su cuenta a exposiciones colectivas en América del Sur y en el Caribe, presentando “poemas objetos”.
Está muy interesado por los desafíos de la poesía, su enfoque puede resumirse en tres palabras: “Libertad, Amor, Poesía“.
A continuación, te presentamos una muestra de su trabajo:
***
Amantes
Dominique Martin
El agua en fragmentos
Huye, se convierte en un espejo.
La mano fluye
Vuelve, suave.
En nuestros cuerpos reflejados
Se unen lágrimas y sudores.
Ágatas incandescentes del deseo
Alargan infinitamente
El día.
Noche vibrada, azul
Tan abrazada.
Epidermis al revés
pasados de una zancada
despellejados.
A las estrellas borrachas
Se derriten al unísono
nuestras pieles besadas.
Y del vértigo de nuestros ojos,
En los labios suspendido,
Nace el tiempo.
En nuestras frentes su mano
Calma el oleaje.
Fuegos de sabana, fuegos de piel,
Quemamos nuestras almas allí.
Más allá del más allá,
Más allá de la desgracia,
África
Certificado de nacimiento de nuestra humanidad
Al final de nuestras noches, El rollo de los sueños
Nos lleva de vuelta al Este
Sudores en los cielos mezclados
Hasta el amanecer Dónde el ónix de nuestros cuerpos
Rompe el cristal del día.
Traducido por Fred ELISABETH
***
Yo canto
Una música
se eleva a las estrellas
Una canción de amor.
Escucho.
Es la voz de una mujer
Amor Amor…
Naranjos andaluces
Hasta la pampa de los gauchos libres
Un lenguaje de amor
Susurra himnos de bocas en orejas.
Escucho
Escucho
Don Quijote declamando y peleando contra los molinos.
Federico García Lorca, Vigilante de Mundos Futuros;
Gabriel García Márquez, allá, muy cerca, en la tierra de las flores;
Mario Vargas Losas, ojos en el azul del cielo, tierra de cóndores;
Luis Sepúlveda, cabalgando sobre las nubes blancas como la nieve;
Pablo Neruda tarareando desde Valparaíso hasta Punta Arenas;
Jorge Luis Borges cegado por la luz en la celeste Patagonia.
Las voces están ahí, vivas, resucitadas.
Es la fiesta de los vivos
Escuchad
Los gauchos cantan en el viento de invierno
Zapata "¡Libre! ¡Libre!" verticales al sol
Bolívar sueña mientras camina con la Hermandad por venir.
Escucho
Quetzal, el ave del Paraíso
contar la historia de la Belleza.
la noche canta
esta noche en español.
Dominique MARTIN el 30 de Octubre de 2022.
***
La golondrina, la única independencia
Golondrina sin frontera
Como una firma azul
ya borrado en el oro de la clara aurora.
aquí allí
ya lejos
muy lejos
sin armas ni pasaporte.
Libre
El soplo del viento es vuestra única patria.
Desnuda y real, sobre mundos encadenados.
Te ríes sin aliento
Dibujas en el cielo tímido y rosa
letras desconocidas para los humanos.
El horizonte es tu reino.
Sin trabas ni dependencia.
Eres el sueño despierto.
De oro y plata, tu bandera representa el mundo futuro.
Libre y sin trabas.
***
Las flores marchitas de Xochimilco
En la barca de mis sueños
una sombra florida se desvanece
En los pétalos nacarados del amanecer
como gotas de rocío azul.
Ella ya no está.
Las nubes en desorden: EN ABUNDANCIA
empañaN las lánguidas guitarras
SOLTERO
aGUARDO/ eSPERO la sonrisa deseada,
Imagino
No veo
Y ya se acercan las risas de Ninopa
Lloro
el Ramo ahogado
En las lagrimas
de Xochimilco.
Dominique MARTIN
***
Asesinato
Bajo las estrellas vegetales
los cuchillos con los fragmentos vertiginosos
levantan sus agujones inmóviles.
La noche se extiende
Y el príncipe con los dientes de espuma
Deja el temor
Los tigres azules
Rozan las lunas
Y abrazan la selva cómplice
El rumor
como un humo de estrellas
despierta los músculos
un sonido
Una palabra
De boca a boca
Como un beso
Libre!
Libre!
Las lágrimas en antorchas
Rompen la ágata nocturna
Otro murmullo resuene de manera amplia
Despierta las Cruces del Sur
Y se rompe sobre los labios
Dchimbo
Dchimbo!
Los torsos se levantan
Como el equinoccio de las mareas
Los príncipes tiernos y crueles
Hablan de mundos por venir
Y las hojas tan frágiles como suspiros
Tiemblan bajo la caricia de las risas.
Están al acecho del más allá de los picos angelicales.
Por ahí
No hay cadenas.
Entonces de rodillas
Dchimbo abraza el río pálido.
Borracho de agua de eternidad
Levanta la mano. Esta noche el maestro va a morir.
Dominique MARTIN
***
Veo, imagino
La risa sin aliento corre
de las playas a las dunas
en el amanecer azul.
Salida del sol. Allí Aquí.
Los niños ya no tienen miedo.
Los amantes aún se abrazan.
El susurro de los besos
han acabado con el odio.
La paz como una embriaguez sin fin.
Es el amanecer de las caricias.
Lágrimas de alegría.
Una mano suave limpia
el dolor en la frente.
Veo, imagino.
Allí, aquí, en todas partes.
Paz como el latido ligero
de las pestañas de la amada o de la emoción
plumas de la paloma tímida.
Escucho, imagino.
Las palabras dan vueltas en sus camas.
Una canción se eleva más allá del más allá
Valientes guerreros rompen sus armas.
Escudriñan el horizonte
Las sirenas llaman el amor.
Ellos están allí, borrachos.
Veo, imagino.
Llevan la Paz.
en sus brazos dorados.
De repente me despierto.
Maravillado
y triste.
Dominique MARTIN
***
Nubes
Dominique Martin
¿Por qué nos gustan las nubes?
¿Nos gustan?
Están aquí
Veo nacimientos ahí
olvidos
gargantas desplegadas
mujeres deseadas
sombra de sombras
pinturas antiguas y recientes
ejércitos derrotados
Veo la confusión del mundo
Nubes, nubes, están ahí en nuestras cabezas
Veo gestos aturdidos, rostros sorprendidos,
pájaros desconocidos, monstruos inocentes.
Las veo como lo opuesto al mundo
formas suaves, etéreas, curvas,
elevadas, alargadas, esquivas.
Sobre nuestras cabezas pesadas y abarrotadas
extienden un mundo débil y fuerte que huye
errante y hermoso.
Nuestros hombros se vuelven ligeros
cuando nuestros ojos se nublan por la noche.
Quizás voluptuosidad.
Nubes, eclipse diurno
bostezo sin fin
Nuestros ojos están perdidos
Escondemos nuestra presa
La noche esta nublada.
Vemos nuestros sueños allí,
sin agarre, pongo mi aliento ahí
Nubes allí y ausentes,
Nos ignoran, las amamos
Rozando horizontes, son palabras ligeras.
Escalofríos imperceptibles
Continentes sumergidos
Están aquí
Sin futuro, disponible para romper, para ver,
a los sueños.
A veces somos
Cuando el amor o la muerte
Ilumina o cierra los ojos.
Traducción del francés: © Anna Georgina St.Clair
***
Dominique Martin