Actualmente, la tecnología ayuda a que sea más rápido el proceso técnico e inmediato la filmación de una película (largometraje), considerando todos los procesos de producción; con la cámara digital y su calidad HD o 4K las producciones han aumentado por año hasta un 70% a diferencia de los años 80’s o principios de los 90’s, cuando el cine estaba abandonado, sin olvidar que para que una película tenga éxito debe existir una buena historia.
Con el paso de los años, algunas producciones independientes han tenido lugar en los premios de la Academia, incluso en Cannes, por nombrar algunos largometrajes tenemos: Año Bisiesto, de Michael Rowe, año 2010; Güeros, Alonso Ruiz Palacios, año 2014; Heli, de Amat Escalante, año 2013; Luz silenciosa, de Carlos Reygadas, año 2007; Preludio, de Eduardo Lucatero, año 2010; Párpados azules, de Ernesto Contreras, año 2007; Todos hemos pecado, de Alejandro Ramírez, año 2008, entre otras. Sin embargo, el estilo ya es el sello de cada director.
El cine independiente, a diferencia del cine comercial, genera más expectativas, va dirigido a cierta clase de público, se puede volver hasta cierto punto en cine de culto.
El cine comercial, en la forma sencilla de la narrativa visual, es más convencional y menos crudo que el cine independiente o de autor, además de que en México el cine comercial ya se volvió cine de comedia, que finalmente no hace más que entretener o e incluso aburrir.
Muchos productores independientes en México se juegan el papel de hacer de todo para realizar un largometraje, desde producir, dirigir, escribir el guion, hacer carpeta de producción, buscar locaciones, etcétera.
Esto es inspirador para todos aquellos que quieren hacer cine y que no saben por dónde empezar, gracias a las convocatorias de festivales que lanzan en las redes sociales.
Las producciones pequeñas se arriesgan a participar y poder obtener, ya sea recursos para sus filmes, o por lo menos quedar dentro de alguna categoría para que puedan promover su trabajo fílmico.
Desgraciadamente en México no tenemos una industria cinematográfica la cual pueda solventar gastos de las producciones tan costosas, que puedan llegar a ser, pero sí hay la forma para lograr filmar un largometraje.
Mientras no haya industria en México, el trabajo será aún mayor en cuanto esfuerzo, pero el resultado puede ser muy satisfactorio siempre y cuando se logre exhibir en las salas de cine, cine clubs, festivales, las películas de productoras independientes.
Como todo, la forma de hacer cine también ha evolucionado, entonces como mexicanos no enfoquemos sólo nuestra mirada a las grandes producciones hollibudenses.
En México hay mucha calidad de películas además de talento, debemos contribuir a ver más películas mexicanas de autor.
Las nuevas tendencias visuales son las series en las plataformas digitales, pero el cine es el cine y jamás se podrá comparar la pantalla grande con ver una serie en tu casa.
Todo es más fácil ahora tecnológicamente hablado, pero más difícil en cuanto a colocar tu película en una sala de exhibición. La gente es exigente con las películas, pero a la vez es conformista, ya que prefiere ver películas de otros países que de México, en donde hay mucha calidad y excelentes películas de cine independiente; que fuera de ser crudas muestran una realidad como tal que se vive en México.
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El autor es egresado de la Licenciatura de Comunicación e Información de la Universidad Madero y cursó también Diplomado en Cinematografía en la UMAD, la carrera intensiva de actuación en la AMCI (Asociación Mexicana de Cineastas Independientes).
Ha participado como actor en rodajes de cortometrajes de producciones universitarias BUAP, UPAEP, AS MEDIA, CINEMA.
También ha participado en series de TV: Dos Lagos, de TV Azteca; La Bandida, Documental Niños Héroes, de History Channel, producción Argentina (Netflix), entre otros.
Participó en Microteatro Puebla, obra la Decisión.
Ha dirigido cortometrajes con producción independiente, entre ellos Hora Cero y Donde hay música.
Actualmente, escribe guiones para cine, para buscar nuevas oportunidades de producir cortometrajes.
