• 28 de Marzo del 2024
TGP

Batres, el emergente

La llegada de Martí Batres, a la secretaría de Gobierno de la Ciudad de México, es la señal más clara de que en la ciudad va a tomar un rumbo más activo en la cancha política

 

Batres Guadarrama, formado en la lucha de vivienda a través de la organización Benita Galeana, en algún momento cercano a René Bejarano, conoce los entresijos de la ciudad y a sus líderes de distintas facciones y partidos.
Morena, en la capital, perdió espacios en buena medida porque la dirigencia local encabezada por Héctor García Nieto perdió el control político y presencia antes después de la derrota electoral del 6 de junio. Su dirigencia se mantiene disfuncional. Por ello es que llega Martí Batres, para apuntalar la base de Morena perdida, y trazar un proyecto de largo aliento.
A final de cuentas, García Nieto no supo capitalizar 24 años de gobiernos izquierda en las alcaldías y por su inconsistencia frente a la oposición se volvió inconsciencia, la alianza Va por México en la ciudad le hizo un hueco al centro del poder del partido oficial y no lo pudo ver en lo amplio. Todo lo reduce a una visión parcial. La entrada de Martí Batres al gobierno de la ciudad no va a garantizar triunfos electorales para 2024. Pero va a tratar de evitar que caiga en manos que se alejen del proyecto de la cuatroté que a final de cuentas permea en la ciudad.
Batres Guadarrama ofrece dialogar “con todos los alcaldes” —de Morena y de la oposición— y tener una relación “institucional y respetuosa”, pues sabe que Morena en la ciudad se encuentra en una posición de fragilidad y eso no es bueno para la Jefa de Gobierno.
Por ello es que no sólo llega a encarrilar al gobierno de Claudia Sheinbaum, sino que también a jugar un papel de superdirigente de partido para guiar a los legisladores de su partido. A final de cuentas, sabe que, García Nieto no pudo darle a Morena la consistencia requerida para tener tres años tersos.
El segundo frente es que, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum se encuentra en la lista de presidenciables y no puede dejar un espacio descuidado. Es la jugada de tener cubiertos varios flancos tanto en la administración de la ciudad como tener al partido más cohesionado y alrededor de una figura que también tiene la ambición de gobernar la ciudad, como es el caso de Batres Guadarrama.
La mancuerna que se construyó en la ciudad es con miras a marcar la línea más fiel a la cuatroté. Martí fue el primer dirigente nacional de Morena y eso le dio la oportunidad de tener control y comenzar a lograr triunfos electorales. Ahora el escenario no es el mismo. Forma parte de un bloque contra el canciller Marcelo Ebrard y el senador Ricardo Monreal. La temporada de destapes ya arrancó y también de las alianzas internas para los próximos meses que se antojan de golpeteo en la ciudad no provoquen huecos.