• 06 de Mayo del 2024

Improvisados en la CNDH (Primera parte)

Al interior de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, crecen grupos de intereses y faltan especialistas

 

El desastre administrativo en la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), encabezada por Francisco Estrada Correa, desborda trabajo y deja pendientes que dañan, a final de cuentas, la defensoría del pueblo.

El secretario ejecutivo, Francisco Estrada, tiene conocimiento del brete administrativo del que se desprenden la mayoría de las decisiones de la CNDH. Pero la agenda política y de grupo es la que predomina entre los integrantes de la CNDH. Por ejemplo, en la auditoría AD-15/2021 se reportan una serie de pifias en la que las observaciones exhiben graves incumplimientos y omisiones, entre ellos, la falta de especialistas.

El desorden más reciente fue el que encontró el Órgano de Control Interno (OIC) al detectar la “falta de seguimiento al calendario de sesiones programadas del Grupo Interdisciplinario para la Organización y Conservación de los Archivos de la CNDH (GIPOCA) 2021, derivado de que no fue celebrada la Tercera Sesión Ordinaria programada en septiembre de 2021.

“Tampoco se tuvo evidencia documental del registro y seguimiento de los acuerdos y compromisos establecidos, así como de la conservación de las constancias respectivas, derivadas de las Sesiones del GIPOCA”. Con estas desatenciones, la CNDH marcha por dos vías. La de los intereses de grupo y los técnicos y de trabajo interno. Este último se mueve en solitario y con traspiés en su operación cotidiana.

De lo más grave son las deficiencias en el perfil requerido de las Personas Responsables del Archivo de Trámite (PRAT's), el OIC identificó el nombramiento de 42 personas responsables de archivo de trámite.

Además, se llevó a cabo un diagnóstico acerca de la especialización de las PRAT's de la CNDH, el OIC llevó a cabo la aplicación de un cuestionario, en el que se distribuyeron cuatro módulos, de acuerdo con los conocimientos explorados en las personas: normatividad archivística, conocimientos básicos, procedimientos (funciones y actividades) y procesos profesionales. Como resultado se obtuvo lo siguiente: de los 36 instrumentos aplicados el promedio de calificación fue de 5.3 y los módulos que presentaron mayores deficiencias fueron los relativos a la normatividad archivística, registrando 32 por ciento de aciertos y el correspondiente a los procedimientos en cuanto a sus actividades que realizan con 36 por ciento de aciertos.

Incluso, la auditoría arroja que 20 servidores públicos nombrados como PRAT's tienen un nivel distinto al que se menciona en el acuerdo profesional. De estas, 34 tienen estudios o especialidades distintas a las estipuladas en el acuerdo. Con estos datos, el OIC determinó la existencia de deficiencias en el conocimiento y especialización de las PRAT's derivado de la aplicación del cuestionario de diagnóstico, especialmente en la normatividad que rige sus actividades y funciones.

La información es la que tiene Estrada Correa en sus manos, pero los temas de coyuntura y su propia defensa son los que atiende, con premura, un organismo público autónomo que perdió de vista mantener una estructura sólida, y solo maneja a sus conveniencias, una agenda personal y del llamado círculo machuchón.