Y es que los migrantes mexicanos que radican en Estados Unidos destacaron por su invaluable apoyo desde la primera línea de la emergencia tanto en el área médica, como en la alimentaria con los trabajadores agrícolas, en la de servicios como limpieza, cuidado de menores, atención al cliente, centros comerciales, etc.
Pero uno de los esfuerzos que más destaca es el del envío de remesas a México que no solo ha sostenido la economía de sus familias y apoyado la atención con medicamentos a quienes se contagiaron por el virus, sino que están sosteniendo la economía mexicana y ahora hasta apoyarán los tratamientos oncológicos de niños y adultos que enfrentan una crisis de atención.
En respuesta, los migrantes recibieron del gobierno mexicano la desaparición de casi todos los programas de apoyo por los que lucharon durante décadas.
Del gobierno norteamericano recibieron amenazas de redadas y hace unos días la declaración del presidente Donald Trump de que serán congelados los salarios de los trabajadores agrícolas los próximos dos años, lo que resulta injusto para cientos de familias que trabajan en las cosechas y que lograron que, a pesar del confinamiento, no falten las frutas y verduras en las mesas de los norteamericanos.
El Día Internacional del Migrante va más allá de festejos y discursos, es necesario promover el respeto a los derechos y la dignidad de los migrantes en todos los ámbitos, que el apoyo sea mutuo.
Siguen denuncias en contra de directora del IPAM
Y hablando de los malos tratos y discriminación que reciben los migrantes, sus organizaciones y sus líderes, está el caso de la directora del Instituto Poblano del Migrante, Ixelt Romero. Ahora es el presidente de la Casa del Migrante Poblano en Los Ángeles, California, Carlos Orea quien denunció la inconformidad que existe entre los paisanos por el actuar de la funcionaria y asegura que tiene en su poder cerca de 300 firmas de migrantes en Puebla, California, Nevada y Nueva York que piden la destitución de la funcionaria estatal acusándola de maltratos laborales, físicos y verbales a diferentes personas.
Además, tiene en su poder la denuncia de una extrabajadora de las oficinas del IPAM que acusa a la funcionaria de maltrato laboral y de obligarla a limpiar su casa en un fraccionamiento privado.
Estas inconformidades se suman a las presentadas por la Unión de Poblanos en el Exterior que incluyen la denuncia de la actual directora de las oficinas en Los Ángeles, California ante la Función Pública por fraude en contra de la titular del IPAM; denuncias que, a decir del propio Gobernador del Estado, Luis Miguel Barbosa, ya son analizadas pero que la respuesta no responderá a presiones externas.
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