Durante su misa dominical, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, recordó a los 53 migrantes que murieron por asfixio dentro de un tráiler abandonado en Texas, Estados Unidos.
Recordó que la mayoría de los fallecidos, 27 a decir de las autoridades, son de origen mexicano.
Sánchez Espinosa se unió al dolor de las familias de los fallecidos, al tiempo de recordar que era gente que buscaba mejores oportunidades.
Aceptó que la migrantes en Norteamérica se ha convertido en dolor, sufrimiento y muerte para muchas personas.
En otro tema, el arzobispo de Puebla también pidió por Brenda N., la niña víctima de feminicidio en Chichiquila, y por el periodista Antonio de la Cruz y su hija, Cinthya de la Cruz Martínez, quienes fueron asesinados en Tamaulipas.
