La exalcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, fue evidenciado en Twitter por integrantes del gabinete estatal e integrantes del Congreso de Puebla, luego de que emitió una burla en contra del gobernador Miguel Barbosa Huerta, quien le reiteró la invitación para marchar en apoyo a la “Cuarta Transformación” el siguiente domingo.
Olivia Salomón Vibaldo, titular de la Secretaría de Economía, fue la primera en responderle a la exedila.
“La mejor manera de honrar el legado de @lopezobrador_ es con el trabajo y tu desempeño dejó mucho que desear para los poblanos. No se trata de llegar primero al @PartidoMorenaMx sino de actuar con los principios de la #4T. No más simulación”, expresó.
Por su parte, Gabriel Biestro Medinilla, secretario del Trabajo, le recordó a Rivera Vivanco las cuentas que tiene pendiente antes las autoridades fiscalizadoras.
“A quien debería invitar a un cafecito es a los de la auditoría para saber qué pasó con el dinero de las minidespensas, de las barredoras, de los respiradores usados, de la aplicación "seguridad incluyente" que costó 40 millones de pesos, o del mantenimiento de las cámaras de seguridad”, señaló.
La diputada local por Tecamachalco, María Ruth Zárate, también le respondió a la morenista: “Puf, qué pena a nosotras las mujeres nos ha costado muchos años llegar a la política; estos comentarios corrientes y querer hacerse la chistosita no dignifica a las mujeres. No recuerdo verla en el plantón en el 2006, ni el desafuero”.
Nora Merino Escamilla, quien es legisladora, contestó a Claudia Rivera: “¿Por qué la búsqueda del protagonismo debe ser una constante? ¿Después de tanta soberbia se ofrece un “cafecito”? Debería empezar por dirigirse con seriedad y dejar de pensar que la antigüedad en el movimiento es lo más importante, la 4T son hechos y ahí quedó a deber mucho”.
En septiembre se dio a conocer que la Auditoría Superior del Estado (ASE) podría sancionar un posible daño patrimonial por 822 millones 810 pesos, correspondientes a la cuenta pública 2020, de la ex presidenta municipal de Puebla.
Solamente en ese año fueron hallados sobrecostos en obras y contratos con anomalías, como la compra de insumos para enfrentar la pandemia del covid-19.
