El fiscal federal Ramiro González presentó cargos contra el expresidente argentino, Alberto Fernández, acusándolo de presuntas lesiones graves y amenazas coactivas contra su expareja, Fabiola Yáñez.
La denuncia de Yáñez, que salió a la luz el 6 de agosto, reveló un patrón de violencia física y psicológica en su relación con Fernández, donde, según la ex primera dama, sufrió hostigamiento, acoso psicológico y agresiones físicas en un contexto de violencia de género e intrafamiliar.
En un escrito, el fiscal González indicó que los hechos denunciados podrían encuadrarse en los delitos de lesiones leves y graves, doblemente agravadas, y amenazas coactivas.
Esta acusación aún depende de la aprobación del juez a cargo de la causa, Julián Ercolini, a quien González solicitó una serie de medidas para avanzar en la investigación.
Entre las solicitudes del fiscal destaca una inspección judicial de la Quinta Presidencial de Olivos, sus adyacencias y anexos, con el fin de esclarecer los hechos denunciados.
Además, se pidió una revisión exhaustiva de las filmaciones de las cámaras de seguridad de la residencia presidencial y su casa de huéspedes correspondientes al periodo entre 2021 y 2023.
González también solicitó la citación de varios testigos clave para el caso, entre ellos María Cantero, exsecretaria presidencial; Federico Saavedra, exjefe de la Unidad Médica Presidencial; Daniel Rodríguez, intendente de la Quinta de Olivos; Miriam Yáñez Verdugo, madre de Fabiola; Sofía Pacchi, amiga cercana de la exprimera dama; y Alicia Barrios, periodista.
La denuncia de Yáñez cobró relevancia pública cuando medios locales publicaron presuntos chats y fotos que mostraban las agresiones. El proceso judicial se encuentra en una fase crucial, con la espera de la firma del juez Ercolini para que la imputación contra Fernández se haga efectiva.